Quería “traer representación de Nueva York, especialmente de El Bronx, donde hay tantas personas de color. Quería estar aquí para decir que lo que ocurrió fue una injusticia”, aseguró el concejal Fernando Cabrera, quien afirmó que “habían lagrimas, personas llorando. También había un momento de esperanza”.

Los uniformados llegaron a los campos sonando las sirenas de sus vehículos a manera de reconocimiento y posteriormente compartieron café y pan con los trabajadores.

A manera de protesta, el grupo de jóvenes levantó esta ofrenda en honor a cientos de personas muertas a manos de policías. Mediante esta acción, buscan concientizar e informar a la comunidad.

El hermano menor y un sobrina de la víctima agradecieron por "todo el amor que están viendo y sintiendo" durante las últimas dos semanas. Hablaron de lo fraternal que era George desde niño y de todo lo que hacía por sus seres queridos a pesar de no tener muchos recursos en su hogar.

Benjamin Crump, quien junto a otros abogados representa a la familia de la víctima, señaló que el responsable de la muerte del afroestadounidense no fue el coronavirus sino el racismo y la discriminación en el país. Y es que la autopsia practicada al cuerpo de Floyd por la oficina del médico forense del condado de Hennepin reveló que era positivo en covid-19.

Scott Hagan, presidente de North Central University, informó que le otorgaron más de 53,000 dólares "para contribuir en favor de la promesa educativa de los líderes jóvenes estadounidenses". Durante la ceremonia de este jueves en el Santuario Frank J. Lindquist, el directivo instó a los presidentes de las universidades de Estados Unidos a que hagan lo mismo.