Hay estereotipos que no son para nada reales, como que las mujeres son el sexo débil. Sin embargo, hay otros que parecen tener algún fundamento científico. Uno de ellos es que las mujeres sienten más asco que los hombres. Si un hombre ve una babosa en la calle, probablemente siga caminando, pero si una chica se encuentra con una es muy probable que se le quiten las ganas de comer por unas horas.

En toda elección democrática alrededor del mundo existen recursos infalibles: guerra sucia, propaganda negra, debates hilarantes y... una que otra propuesta por parte de los candidatos. Lo cierto es que nada de esto decide el resultado de las contiendas y en realidad el factor clave radica en los sentimientos y esto aplica a todos los procesos que se llevan a cabo dentro de una democracia.

Para muchos usar lentes es señal de que alguien es un «nerd», o un «cuatro ojos». El estereotipo de las personas cortas de vistas y la inteligencia no es algo nuevo, y ahora parece que hay algo de verdad detrás de esa creencia.

¿Introvertido o extrovertido? Esa es la cuestión. En general, se tiende a creer que una persona tímida y apocada tiene una personalidad introvertida y, por el contrario, alguien con un gran encanto social tiene los típicos rasgos de un extrovertido. Ahora bien, no todo se trata de extremos ni contraposiciones en la ciencia que estudia nuestra mente.

Al momento de elegir una profesión u oficio muchos toman en cuenta el dinero que ganarán, el prestigio o aquello que les apasiona. Trabajando se presenta un factor que no suele tomarse en cuenta al principio y que puede ser clave para realizar un buen trabajo: el estrés.

Tal vez estás a punto de entrar a la universidad o deseas continuar tus estudios de posgrado. Puede que quieras perfeccionar tu japonés o que seas un maestro con ganas de superarte. Si siempre has soñado con viajar a Japón y deseas ampliar tus conocimientos mientras conoces el mundo, conseguir una beca en el país del Sol Naciente es más sencillo de lo que creías.