Una novedosa prueba de sangre es capaz de detectar cualquier tipo de cáncer hasta 10 años antes de los síntomas: te explicamos en qué consiste la biopsia líquida.
Las vacunas contra el coronavirus representan una luz de esperanza en medio de la pandemia, pues es una medida que puede evitar muchas más muertes por esta nueva enfermedad y hacernos vislumbrar un posible regreso a la normalidad.
No se necesita beber en exceso para aumentar el riesgo de padecer cáncer: un nuevo estudio relacionó casos recientes con consumidores moderados de alcohol.
El cáncer es una de las enfermedades que más vidas cobra alrededor del mundo, y si bien existen diversos tratamientos para combatirlo, por el momento las formas de prevenir este padecimiento se limitan al cambio de la dieta, la eliminación del consumo de tabaco o la detección temprana del mismo.
Un grupo de científicos desarrolló un innovador tratamiento contra el cáncer, el cual ocasiona que las células infectadas se autodestruyan desde adentro, como un caballo de Troya.
La lucha contra el cáncer se mantiene firme, gracias a que la comunidad científica día con día perfecciona los métodos para su detección y combate, los cuales busca hacer menos dañinos para el cuerpo.
El cáncer es una de las principales causas de muerte en el mundo. De acuerdo al Informe Mundial del Cáncer del 2014, cada año se diagnostican más de 14 millones de casos, de los cuales 8 millones son mortales.
Cada vez es más fácil detectar el cáncer antes de que sea demasiado tarde gracias a diversos avances científicos, pero las cifras de las víctimas continúan estables sobre todo en hombres, algo que no tenía explicación hasta hace poco.
Las emisiones de automóviles, los químicos que salen de las fábricas, el polvo, las sustancias tóxicas, las esporas, entre otros contaminantes, están afectando no sólo el medio ambiente, también a la salud.
El cáncer es una de las enfermedades que más vidas arrebata cada año. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que tan solo en el años 2012 más de 8 millones de personas fallecieron a causa de este mal, siendo el cáncer de pulmón, hígado, estomago, colon y mama los más comunes.
Cada año mueren más de 8 millones de personas alrededor del mundo debido a algún tipo de cáncer, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Uno de los problemas principales es que muchos casos se diagnostican en una fase avanzada, cuando es más difícil que los tratamientos den resultados positivos.
Dicen que «de amor nadie se muere», pero un nuevo estudio publicado en la revista American Heart Association refuta esta popular frase con argumentos científicos: el Síndrome de Corazón Roto sí aumenta las probabilidades de padecer cáncer.
Nuestra vida no sería igual sin los anticonceptivos orales, porque con estas pequeñas pastillas las mujeres tenemos control total sobre dos aspectos de nuestra vida: cuándo tener un hijo y cuántos. Sin embargo, no todo en este método es tan 'liberador', desde su aparición en los años sesenta han surgido diversos misterios médicos alrededor de él; uno de ellos es su relación con el cáncer. ¿Qué tanto hay de cierto que prevenir un embarazo puede ayudar al desarrollo de dicha enfermedad?
Una actividad cada vez más extendida entre los jóvenes es fumar en pipa de agua. Una de las razones de la popularidad de esta práctica es que se cree que es menos perjudicial que fumar cigarrillos o que está libre de efectos nocivos para la salud. Pero ya hay estudios que confirman que esta afirmación es falsa: fumar en pipa de agua tiene consecuencias, muchas de ellas diferentes a las del cigarrillo, pero igual de peligrosas.
El cáncer es una enfermedad que tiene muchos signos que suelen pasar inadvertidos y también tiene tratamientos menos invasivos que la quimioterapia. De cualquier manera, es importante consultar a los especialistas para ver cuál es el mejor tratamiento en base a tu situación personal.
Aunque los tratamientos contra el cáncer continúan mostrando avances significativos, las causas diversas de esta enfermedad continúan intrigando a la comunidad científica.
Cuando nos sentimos mal, dos preguntas nos vienen a la cabeza: ¿cómo estará mi presión sanguínea?, y ¿cuál será mi frecuencia cardíaca? Pero hay una tercera que es igual de importante, si no más: el adecuado ritmo de respiración.