Citlali Pérez, presidenta de la organización, explica que el objetivo es crear un espacio para que los dreamers se vean asesorados y acompañados. El próximo miércoles 20 de diciembre se realizará una jornada para reunir fondos que serán invertidos en los jóvenes que asisten al club.

Liliana Domínguez, beneficiaria de DACA, aprovechó el evento “Abrazos, no muros” realizado el domingo pasado en la barda fronteriza que separa New Mexico (EEUU) y Chihuahua (México) para casarse con su novio deportado y así llamar la atención del Congreso sobre la necesidad de una solución definitiva para los soñadores.

Phill Murphy, el gobernador electo de Nueva Jersey, aseguró que planea una visita a la isla que se vio gravemente afectada por el paso del huracán María. En temas de educación cree es importante realizar una gran inversión para que estudiantes de bajos recursos se vean beneficiados. Finalmente, habló sobre sus acciones para ayudar a la comunidad inmigrante.

Allyson Duarte era buena, se esforzaba mucho y soñaba con jugar fútbol en una de las mejores universidades de Estados Unidos. Pero pronto supo que el talento no significa nada cuando no tienes papeles.

Decenas de activistas y familias, muchas separadas por el muro que separa Estados Unidos de México, se reunieron para definir las demandas de los dreamers en ambos lados de la frontera, y pedir medidas que aseguren el amparo de más de 700,000 jóvenes indocumentados que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños.

Los menores pretendían dejar peticiones escritas en la oficina del líder de la Cámara de Representantes en Washington a fin de que los legisladores tomen decisiones que favorezcan a sus familiares con DACA o TPS. La mexicana Laura Pericha, quien llegó a Estados Unidos cuando tenía 13 años, expresó llorando que le gustaría celebrar la Navidad sin miedo a la deportación.