Los demócratas lanzan una agenda populista para oponerse al populismo de Donald Trump

Los demócratas quieren evitar volver a cometer los errores que les han llevado en los últimos veinte años a perder la presidencia, las mayorías en el Congreso y multitud de elecciones regionales y locales, al mismo tiempo que combaten las políticas de Donald Trump.

Este lunes, a pleno sol, en el pequeño pueblo de Virginia de Berryville cercano a Washington DC y en mangas de camisa, los líderes demócratas del Congreso presentaron la agenda con la que esperan recuperar el espacio y los votantes perdidos ante los republicanos.

“Las familias estadounidenses merecen un trato mejor para que este país funcione para todos de nuevo, no solo para las élites, no sólo los intereses especiales. Hoy los demócratas empezamos a presentar ese mejor trato al pueblo estadounidense”, dijo el líder de la mayoría demócrata en el Senado, Charles Schumer.

Aunque las palabras de Schumer no son nuevas entre los demócratas, reflejan en gran medida el discurso con el que Trump atrajo a millones de estadounidenses trabajadores frustrados por la pérdida de oportunidades económicas y le ayudaron a llegar a la Casa Blanca.

La nueva plataforma demócrata incluye puntos como mejoras de salarios, apoyo a familias con niños o entrenamiento laboral, propuestas con los que esperan atraer a esa parte de los votantes que se sintieron atraídos por el mensaje del hoy presidente.

El mea culpa demócrata

Schumer repitió los conceptos que ya había expresado en un artículo publicado horas antes en The New York Times en el que reconoció la falla de su partido en comunicarse con la población al “fallar en articular un programa económico fuerte y audaz para la clase media”.

“También fallamos en comunicar nuestros valores para mostrar que estábamos del lado de la gente trabajadora, no los intereses especiales. No repetiremos el mismo error. Este es el inicio de uan nueva visión para el partido”, dijo Schumer.

Pese a que los líderes demócratas aseguran que no se trata de una realineación ideológica del partido, los planteamientos presentados van en línea con las ideas que viene promoviendo desde la izquierda la senadora Elizabeth Warren -quien estaba presente en Berryvlle) o el también senador y exaspirante presidencial Bernie Sanders.

Sin embargo, la presidenta del Comité Nacional Republicano, Ronna McDaniel, aseguró en un comunicado que la “extrema izquierda” se había apoderado de la organización opositora.

“Hasta que los demócratas hagan un verdadero esfuerzo para trabajar con los republicanos y el presidente Trump en las prioridades por las que los votantes apoyaron en noviembre, va a seguir perdidos en el desierto electoral”.

La nueva estrategia demócrata también puede ser vista como parte de los esfuerzos para lograr la mayoría en la Cámara de Representantes en las elecciones de medio término previstas para 2018.

Los demócratas necesitan 24 escaños para desplazar a los republicanos, algo que algunos expertos consideran posible visto la tendencia del partido en la Casa Blanca de perder fuerza parlamentaria.