Exasesor de campaña de Trump fue investigado en secreto por el FBI por supuestos nexos con Rusia

El FBI investigó al exasesor de la campaña de Trump Carter Page el año pasado por temor a que pudiera haber estado trabajando para Rusia, informó este martes el diario The Washington Post.

En la primera confirmación de que el gobierno llevó a cabo una vigilancia sobre el equipo del presidente Donald Trump, el Buró Federal de Investigaciones obtuvo del Tribunal de Vigilancia de Inteligencia Extranjera una poco común orden para supervisar las comunicaciones de Page .

La llamada orden de FISA (Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera) fue emitida después de que el FBI advirtiera al tribunal que existían serias sospechas de que el exbanquero Page trabajara para Rusia.

Las órdenes de FISA casi nunca se hacen públicas, y el Post citó a agentes de la ley sin nombre y otros funcionarios en su informe. El FBI no respondió a las solicitudes de comentarios sobre el informe.

Hasta ahora, ésta es la evidencia más clara que el FBI tenía razones para creer durante la campaña presidencial de 2016 un consejero del equipo de Trump estaba en contacto con agentes rusos. Estos indicios son ahora el centro de una investigación sobre si la campaña se coordinó con el gobierno ruso para intervenir en las elecciones presidenciales a favor del republicano.

Page no ha sido acusado de ningún crimen, y no está claro si el Departamento de Justicia podría buscar cargos contra él u otros en relación con la investigación.

Trump ha llamado repetidamente a la noticia de la interferencia rusa "noticias falsas", al tiempo que ha alegado, sin ofrecer evidenciaa, que la administración anterior del presidente Barack Obama lo espió a él y a su campaña.

Page se compara con Luther King Jr.

Durante una entrevista con el Washington Post en marzo de 2016, Trump identificó a Page como asesor de política exterior de su campaña. La entonces vocera de la campaña Hope Hicks describió más tarde el papel de Page como "informal".

En marzo de 2016, Page asistió a la convención republicana en julio, donde él y otros se reunieron con el embajador ruso Sergey Kislyak.

Meses después, fue rechazado por la campaña de Trump, aparentemente en parte por sus viajes a Moscú, que según él eran por negocios privados.

Page ha negado en repetidas ocasiones cualquier incorrección en sus tratos con la campaña de Trump o Rusia.

"Esto confirma todas mis sospechas acerca de la injustificada y políticamente motivada vigilancia gubernamental", dijo Page al WP en una entrevista el martes.

"No tengo nada que esconder", remató para después comparar la vigilancia de la que ha sido objeto con las escuchas que el FBI y el Departamento de Justicia llevaron a cabo contra el líder de los derechos civiles Martin Luther King Jr.

Contactos en Moscú

De acuerdo con el diario, Page trabajó en Moscú para el banco Merrill Lynch hace una década, e hizo inversiones en el gigante energético ruso Gazprom. En una carta dirigida al director del FBI, James Comey, en septiembre, Page había dicho que había vendido su inversión en Gazprom.

Durante una audiencia del mes pasado en la comisión que investiga el tema de la presunta intervención rusa en las elecciones, los legisladores demócratas repetidamente señalaron los contactos de Page en Moscú como motivo de preocupación.

La solicitud del gobierno para la orden de vigilancia dirigida a Page incluyó una larga declaración que estableció la base de los investigadores para creer que Page era un agente del gobierno ruso y consciente de participar en actividades clandestinas de inteligencia en nombre de Moscú, dijeron las autoridades.

El nombre de Carter Page surgió en un informe sobre los vínculos entre la operación Trump y Rusia elaborado por el exespía británico Christopher Steele.

La solicitud de investigación a Page hecha por el FBI cita los contactos que tuvo éste con un agente de inteligencia ruso en Nueva York en 2013, dijeron las autoridades. Esos contactos habían surgido antes en un caso federal de espionaje presentado por el Departamento de Justicia. Además, funcionarios involucrados en la investigación señalaron que Page tenía otros contactos con operarios rusos que no han sido revelados públicamente.

Page es el único estadounidense al que se interceptaron sus comunicaciones con una orden de FISA en 2016 como parte de la investigación del caso de intervención de Rusia, dijeron al WP las autoridades.

Una solicitud de vigilancia electrónica bajo la Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera no necesita mostrar evidencia de un crimen. Pero la información obtenida a través de las intercepciones se puede utilizar para abrir una investigación penal y puede ser utilizado en una acusación.

El FBI obtiene rutinariamente órdenes de FISA para supervisar las comunicaciones de diplomáticos extranjeros en los Estados Unidos, incluyendo el embajador ruso, Sergey Kislyak. Las conversaciones entre Kislyak y Michael Flynn, quien se convirtió en el primer asesor de seguridad nacional de Trump, fueron grabadas en diciembre.

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