WASHINGTON. Cuando durante la campaña Hillary Clinton descalificó a la mitad de los seguidores de Donald Trump lanzándolos a la "cesta de los deplorables" el cubanoestadounidenses de Miami Evelio Medina sintió que ya había pasado por algo similar.
El empresario cubano que quiere organizar una "nación de deplorables" para apoyar a Trump
Evelio Medina y otros seguidores del presidente electo usan con orgullo el insulto que Clinton profirió contra ellos en campaña. Este jueves, al menos dos de las galas en honor al presidente electo llevan por temática "los deplorables".


"Fidel Castro nos llamaba gusanos, la mafia de Miami, pero somos gente trabajadora y emprendedora", le dice Medina a Univision Noticias. En lugar de sentirse ofendido, Medina, un empresario de Miami que lleva años trabajando con políticos republicanos, vio el desliz de Clinton como una oportunidad. Previó con acierto que el insulto que se le deslizó a Clinton iba a ser portado como una insignia de honor por Trump y los suyos y registró varias webs que llevaban en el dominio el nombre "deplorables".
El proyecto de Medina es ambicioso. Dice que va a crear una organización sin ánimo de lucro que se llamará Nación de Deplorables y funcionará durante el gobierno a modo de "quinta columna" para apoyar al próximo presidente.
Para promocionarlo y expresar su gratitud con Trump organizó la gala Deplorables Inauguration Ball, una de las galas que esta semana festejan en Washington DC el comienzo del nuevo gobierno, que será efectivo el viernes al mediodía.
Se celebrará en el grandioso Ronald Reagan Building y hay 2,000 entradas a la venta con un precio que oscila entre $500 y $1,000. El presidente electo está invitado pero no se sabe si aparecerá ya que Trump no ha dejado claro todos los detalles de su agenda entre hoy y mañana.

La de Medina no es la única gala que llevará como temática los deplorables. El DeploraBall, otro baile que está siendo organizando por un grupo de simpatizantes de Trump de línea dura entre los que se encuentra el hispano Jeff Giesea (de madre mexicana). Entre los asistentes habrá varios nombres conocidos de la Alt-Right (el eufemismo con el que ahora se promueven los supremacistas blancos y otros).
Es significativo que los seguidores de Trump estén tratando ahora de desvincularse del término "Alt-Right". En una entrevista con el diario Boston Globe Giesea dice que prefiere que les llamen "trumpistas" o "deplorables".
Clinton había usado el término durante un evento en Nueva York el 9 de septiembre para referirse a los seguidores de Trump que son "racistas, machistas, homófobos, xenófobos, islamófobos".
Luego se arrepintió de haber usado esa palabra. No está claro cuánto ayudó el desliz de Clinton a Trump pero sin duda sirvió para movilizar a los seguidores del republicano.
Las camisetas con mensajes como "somos los deplorables" fueron un éxito y Trump no perdía ocasión para recordarlo. En campaña Trump apareció sobre un escenario en Miami para proclamar orgulloso: "Saludos a todos ustedes deplorables".
A pocos parece molestarles la palabra. Medina asegura que ha usado Google Analytics y otras herramientas de redes sociales para concluir que en los últimos tres meses el término ha sido usado positivamente en 73 millones de ocasiones.
"Cuando yo escuché a Clinton llamarnos así pensé esto es un momento clave", dice Medina. "Sabía que eso nos iba a levantar". Medina cree que el movimiento que llevó a Trump al poder se mantendrá vigoroso durante el gobierno aunque que los críticos señalan que al llenar su gabinete de multimillonarios Trump ya está perdiendo apoyo de las bases obreras. Él pretende que el apoyo a este próximo presidente sea incondicional: "Si al presidente le va mal, al pueblo le irá mal".
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