Presentan cargos a la mujer que ocultó la diabetes que mató a su hija

Una mujer del condado de Madison, en Illinois, está siendo acusada de homicidio involuntario después de que su hija de 14 años muriera por complicaciones de una diabetes no tratada.

Se cree que la madre ocultó el diagnóstico durante cinco años. Una orden de registro muestra que tenía medicinas en el hogar pero nunca se las dio a su hija.

Emily Ikue-Rose Hampshire murió el 3 de noviembre a causa de una cetoacidosis diabética. Según la Asociación Estadounidense de Diabetes, la cetoacidosis ocurre cuando el cuerpo de una persona no tiene suficiente insulina y comienza a descomponer grasas. En este proceso produce cetonas, una sustancia química que, cuando se acumula en la sangre de una persona, hace que la sangre sea más ácida. Los altos niveles de cetonas actuaron como un veneno en el cuerpo.

Los fiscales alegan que Emily desarrolló cetoacidosis porque su madre, Amber L. Hampshire, no solo no le brindó el tratamiento médico que necesitaba para su diabetes, sino que ocultó el diagnóstico del adolescente a médicos, maestros, amigos y familiares, incluido el padre de la niña.

Este jueves el fiscal estatal Tom Gibbons presentó cargos contra Amber L. Hampshire, quien se entregó y luego pagó una fianza, que se fijó en 100,000 dólares.

"Amber Hampshire tenía toda la información y todos los recursos disponibles para ocuparse de esto y, en cambio, optó por ocultarlo incluso a los miembros de la familia más cercanos", dijo Gibbons a Fox News.

El motivo de por qué la mamá no le suministró tratamiento no está claro y, al parecer, la religión no jugó un papel, agregó Gibbons.

El 1 de noviembre, luego de recibir una llamada al 911, la policía acudió a la casa de la familia y encontró a la niña inconsciente. Equipos de emergencia determinaron que la adolescente tuvo un paro cardíaco. La llevaron a un hospital de St. Louis, donde murió dos días después.

Según las autoridades, a la adolescente se le diagnosticó diabetes en 2013 y varias veces había sufrido graves complicaciones médicas como resultado de la cetoacidosis diabética. En febrero de este año, Emily había sido hospitalizada. Según los informes, se le recetó insulina como un medicamento de rutina después de su liberación y se le proporcionó más información sobre la diabetes, la insulina y las necesidades dietéticas. También le programaron tres citas de seguimiento, pero nunca se presentó.

No hay pruebas de que la niña haya visto a un profesional médico en relación con el diagnóstico de diabetes luego de su hospitalización a principios de año.

Los familiares le informaron a la policía y al personal médico que Emily había estado enferma con náuseas, vómitos y diarrea durante días antes de que se la encontrara sin respuesta esa mañana, según el St. Louis Post-Dispatch.

Amber Hampshire también fue despedida por su empleador, la Escuela St. Ambrose Catholic School Godfrey. La institución publicó la siguiente declaración: "La Escuela Evangélica continúa llorando la muerte de Emily Hampshire, estudiante de octavo grado, una alumna brillante. Ayer nos entristeció recibir una notificación del Departamento de Policía de Alton de que Amber Hampshire, la madre de Emily y ayudante de maestra de preescolar en la escuela, fue acusada de su muerte. La señora Hampshire había sido puesta en licencia administrativa después de la muerte de su hija, cuando la escuela se enteró de que el Departamento de Servicios para Niños y Familias y el Departamento de Policía de Alton estaban realizando una investigación. Debido a los cargos ahora formales presentados contra Amber Hampshire, ella permanecerá en licencia administrativa. Pedimos que continúen las oraciones por nuestra escuela y por el hermano de Emily, Ethan".

Si es declarada culpable de los cargos, Amber Hampshire podría enfrentar hasta 24 años de prisión.