De lo que no se habló en el cuarto debate demócrata

Por Carlos Chirinos (@carl_chirinos), editor político principal de UnivisionNoticias.com

La última pregunta del cuarto debate demócrata presentado este domingo fue: “¿Qué le habría realmente gustado decir que no tuvo oportunidad de decir?”.

Fue irónico que el moderador Lester Holt, de NBC, la dirigiera primero al exgobernador de Maryland Martin O’Malley, justo el que menos tiempo tuvo para expresar sus ideas durante el careo.

Y por la respuesta, parece que el exgobernador habría podido ayudar a ampliar la agenda del debate, sobre todo llevándolo hacia temas muy vinculados con América Latina.

Pero sus compañeros de foro, la exsecretaria de Estado Hillary Clinton y el senador independiente por Vermont Bernie Sanders, acapararon las casi dos horas que duró el encuentro organizado por NBC News y YouTube

Cada uno de ellos habló cerca de 28 minutos, frente a los 13 del exgobernador de Maryland, quien no logró colarse en la conversación, en gran medida porque sus contrincantes por la candidatura se enfrascaron en varios mano a mano.

Sin choque de trenes

Fue el debate demócrata con intercambios más duros hasta ahora entre los candidatos que marchan adelante en las encuestas: Clinton y Sanders.

Muchos daban por descontado que la cortesía llegaría a su fin por la necesidad de marcar distancia, sobre todo en Iowa y New Hampshire, donde comienza el proceso de primarias y donde ambos lucen parejos en las encuestas.

Y aunque chocaron en temas como el futuro de Obamacare (el sistema de salud) o la reforma del sistema financiero, no llegó a producirse el choque de trenes que muchos vaticinaban.

Pero es notable que Sanders no aprovechara la polémica figura del Bill Clinton para atacar por mampuesto a la exprimera dama y que, al contrario, expresara su irritación con una pregunta que le habría permitido explicar una crítica que hiciera en semanas pasadas al expresidente.

En medio de esos pulsos, O´Malley trató de explicar su plan de crear una red de energía eléctrica “limpia” para mediados de siglo y plantear sus propuestas en materia de seguridad nacional.

América Latina inexistente

La respuesta final de O’Malley mostró lo cerca que está el exgobernador de la comunidad hispana y en general de América Latina, temas de los que ha hablado durante su campaña.

“No hemos discutido completamente reforma migratoria y el deplorable número de campos de detención para inmigrantes que está manteniendo nuestra nación”, empezó

“No hemos discutido el vergonzoso tratamiento que el pueblo de Puerto Rico, nuestros compatriotas estadounidenses, está recibiendo de esos fondos de inversión que los apabullan”.

“No hemos discutido el hecho de que en nuestro hemisferio tenemos el peligro de estados fallidos por culpa de los narcotraficantes, y Honduras, y Guatemala”

Y no se discutió. Para la respuesta final, casi de cortesía, O’Malley tenía tan solo un minuto.