Tyrone Poole no tenía a donde ir cuando se arrastraba en muletas hacia una estación de autobuses de Portland a finales de 2006. Su pierna, todavía sanando de una devastadora lesión muscular, le ardía de dolor. Se desplomó y vomitó sobre un banco. Un agente de la policía lo encontró y lo llevó a un local YWCA, que a regañadientes lo aceptó después de horas.
La app que está acercando a la gente a la vivienda asequible en Portland
Tyrone Poole, el fundador de NoAppFee.com, en algún momento no tuvo techo. Ahora está haciendo más fácil la búsqueda de alquileres con su empresa.


"Me dieron un catre en el piso del gimnasio. Olía a vómito. Todo lo que poseía estaba en una bolsa debajo de la cama", dice Poole, ahora de 34 de años. "No podía creer que había ido de tener una vida exitosa a estar en estas condiciones".

Sólo un año antes, Poole era un joven en ascenso. Había terminado su licenciatura en Portland Community College y se estaba capacitando para ser bombero. Pero una herida en la pierna y una hospitalización prolongada le costaron su puesto en la academia y lo sumieron en una profunda deuda. Después vino el desalojo. Su auto fue embargado. Poole se quedaba con sus amigos hasta que el último de ellos lo echó de su casa. Y así como así, se encontró sin hogar.
La mañana siguiente después de haber tocado fondo, una trabajadora del refugio lo paró e insistió en que le dijera su nombre. Ella le dijo que podía obtener asistencia para el pago del alquiler si aplicaba simplemente mediante la oficina local de la vivienda. Él lo dudó (no se identificaba como alguien que necesitaba ayuda), pero postuló e inmediatamente calificó para un año de apoyo. "Estaba muy emocionado", dice. "Pensé que saldría de allí en una semana".
Estaba equivocado: le tomó meses y no por falta de unidades disponibles. Poole descubrió que el obstáculo más grande entre él y un apartamento era la misteriosa red de calificaciones que los arrendadores le solicitaban como inquilino. Los administradores de propiedades parecían no tener ni motivo ni razón para aceptar a unos u otros, y a él sólo le quedaba cruzar los dedos y esperar. Cada vez que postulaba y no tenía éxito, eran otros 30 ó 50 dólares. Era dinero que realmente no tenía y que se desperdiciaba.
Éste sería el momentro decisivo en la vida de Poole: decidió que su misión era ayudar a otros a evitar el misterio burocrático y la carga financiera. Actualmente, es el fundador y director ejecutivo de NoAppFee.com, una plataforma en línea de acceso único que evalúa a los potenciales inquilinos contra las especificaciones exactas de unidades vacantes, prácticamente libre de costo. Es una solución elegante para lo que es un proceso exasperante en Portland y otras ciudades. Y podría eliminar una barrera innecesaria para muchos de aquellos que buscan apartamentos, en todo el espectro de ingresos.
Sin ayuda ajena
Según la Oficina de Vivienda de Portland (PHB, por sus siglas en inglés), más de dos tercios de las 125,000 familias de viviendas alquiladas de la ciudad califican para una vivienda asequible. Pero sólo un 25% de las 14,000 unidades de vivienda a precios asequibles que la PHB supervisa son asignadas cada año. Después de todo, éste es uno de los mercados más dinámicos del país. Ése es el factor más importante que evita que las personas encuentren unidades asequibles en Portland.
Pero, además de la escasez, los inquilinos deben ajustarse a una desconcertante variedad de criterios —diferentes en cada propiedad—cuando aplican para una unidad. Aunque la ley federal requiere que estos criterios sean públicos, en la mayoría de los casos los solicitantes todavía tienen que saber que los pueden pedir. De lo contrario, descubren que después de pagar sus honorarios que algunas propiedades tienen subsidios especiales para ciertos tipos de inquilinos (personas que han salido de la cárcel, por ejemplo), pero no hay subsidios para otros (como personas con mal historial crediticio o desalojos previos). Esto también se aplica tanto a las personas sin hogar como a la población en general, pero es una carga mucho mayor para quienes no tienen tiempo o dinero, para averiguarlo de la peor manera.
Después de que Poole encontró finalmente una unidad, comenzó a trabajar en el refugio. Conforme rehacía su vida, veía a muchas personas luchando contra los mismos objetivos móviles en la búsqueda de alojamiento. Algunos tenían vales del programa Sección 8, asistencia de Asuntos de Veteranos o apoyo de programas de violencia doméstica o discapacidad, pero seguían siendo afectados. Poole compiló manualmente una lista de todos los criterios de selección que pudo encontrar para ayudarlos, pero las condiciones de los administradores seguían cambiando.
Para ese momento, ya era 2013. ¿Por qué no podría automatizarse este proceso?, se preguntó Poole. El simple concepto resultaba emocionante para todas las personas a quienes les decía. Un prestamista de un banco local presentó Poole a la agencia de desarrollo económico de Portland, la cual estaba lanzando un concurso para la financiación empresas ‘start-up’ con conciencia cívica creadas por empresarios de minorías. Poole, quien es afroestadounidense, entró en el concurso en 2014 y ganó, obteniendo un fuerte respaldo financiero, espacio de oficina gratuito y una multitud de conexiones de la industria tecnológica.
Poole lanzó NoAppFee.com en versión beta en 2015. Esta versión estaba destinada al mercado general de la vivienda, no sólo a aquellos que buscaban viviendas asequibles. Ocho empresas de gestión de la zona de Portland accedieron a participar y brindar sus unidades abiertas —por encima y por debajo de las tasas del mercado— y criterios de evaluación a Poole y su equipo. No pagaron nada por incluir sus anuncios (unos 80 al principio). Los inquilinos tenían que introducir su número de Seguro Social y fecha de nacimiento y pagar 35 dólares por una verificación de crédito y antecedentes, reembolsables una vez que hubieran pagado el primer mes de alquiler. A cambio, los conectaban con todas las vacantes a las que calificaban, de forma automática.
Una aplicación, varios anuncios de apartamentos: esto es algo que revolucionó el mercado de la vivienda. En el plazo de un mes, dice Poole, el sitio ya tenía 1,700 usuarios registrados, sobrepasando con creces el suministro inicial de unidades. "Estábamos dando 10 ó 15 reembolsos al día", recuerda Poole.
La interfaz de búsqueda de propiedades de NoAppFee.com (NoAppFee.com)
La asociación con Portland
Más o menos al mismo tiempo, la Oficina de Vivienda de Portland estaba buscando maneras de ayudar a los lugareños a atravesar el laberinto de organizaciones sin fines de lucro y administradores de propiedades privadas que ofrecían unidades a precios asequibles. "Alguien que busca vivienda tendría que ponerse en contacto regularmente con 10 ó 20 organizaciones semanalmente para averiguar sobre vacantes", afirma Matthew Tschabold, administrador de políticas y capitales de PHB. "Era una gran carga para las personas que ya son de bajos ingresos y que luchan por vivir y trabajar en nuestra comunidad".
Al argumentar la necesidad de un punto único de entrada más simple a la búsqueda de viviendas asequibles, PHB obtuvo bastante efectivo del fondo de innovación de la ciudad en el año 2015 para ofertar por un producto mejor. Así fue como se conectó con NoAppFee, la cual terminó ganando un contrato. Ahora PHB y el equipo de Poole están trabajando para construir un sitio web .gov equipado con el software de NoAppFee adaptado a los residentes de Portland que atiende la PHB. Tschabold dice que debe ponerse en marcha en algún momento del próximo año.
Habrá algunas diferencias importantes. Por ejemplo, la versión .gov no requerirá de un número de Seguro Social o una tarjeta de crédito para pagar, ya que no todo el mundo cumple con esos requerimientos. Pero la experiencia eficaz será la misma. Hay otras ciudades con plataformas en búsqueda de vivienda de acceso único, como Nueva York. Pero la originalidad de NoAppFee reside en el hecho de que reúne un ecosistema de propietarios y tipos en el mismo espacio.
Una plataforma única para ajustes de vivienda también le dará a Portland una ventaja en la identificación de casos de discriminación a los inquilinos. Si los candidatos satisfacen todos los criterios, pero aún no son aceptados por un administrador de propiedades, se les avisa a las autoridades de la vivienda que podría haber otro factor en juego, como raza, discapacidad o religión. Esos datos pueden ser indispensables conforme la ciudad intenta aumentar su oferta de viviendas asequibles. Después de todo, el estado de Oregon acaba de revertir su prohibición sobre la política obligatoria de viviendas incluyentes. "Si vemos que hay grandes grupos de inquilinos a quienes se les impide recibir viviendas, eso podría contribuir en las decisiones sobre las leyes propietario/arrendatario", dice Tschabold.
Mientras tanto, Poole está apresurándose para relanzar NoAppFee.com para el mercado general, con cientos de anuncios adicionales. Otra mejora importante: la nueva página web les dirá a los solicitantes que no se ajustan a las unidades exactamente qué necesitan hacer, ya sea adquirir un historial crediticio o completar un curso de "inquilino responsable". Decenas de compañías adicionales de gestión de propiedades también se han puesto en línea. Poole dice que algunas compañías se han mostrado cautelosas en cuanto a su proyecto—les gusta tener el control sobre quién entra a sus unidades—pero la mayoría se ha mostrado entusiasta sobre la automatización del proceso exhaustivo de encontrar inquilinos calificados, incluso aunque ello signifique perder las cuotas de solicitud.
NoAppFee también se ha lanzado en mercados pequeños en el condado de Kings, en Washington y en partes de Georgia, mediante colaboraciones con los funcionarios locales. Pero Poole está enfocado principalmente en hacer de Portland un éxito para poder replicarlo en otros lugares. En última instancia, dice Poole, le encantaría incorporar el software en sitios como Zillow para llevarles una búsqueda simplificada de vivienda a todos en el mercado: personas ricas, pobres, y de medianos ingresos por igual.
"Ése será el cambio radical", dice. "En ese momento acabaremos con el desamparo innecesario".
Este artículo fue publicado originalmente en inglés en CityLab.com.






















