Un juez estadounidense falló este miércoles a favor de una moción del expresidente boliviano Gonzalo Sánchez de Lozada y el exministro Carlos Sánchez Berzaín y desestimó el fallo del jurado que declaró a ambos responsables civiles de la muerte de ocho personas en protestas registradas en Bolivia en 2003.
Un juez de Florida desestima el fallo del jurado que declaró culpable a expresidente boliviano Sánchez de Lozada
El juez James I. Cohn considera que los demandantes no presentaron evidencias que demostrasen que el exmandatario tenía un "plan concebido para matar civiles". La defensa dijo que apelará la decisión.


"Los demandantes no presentaron ninguna evidencia" de un "plan concebido para matar civiles", señaló el juez James I. Cohn en el documento.
En una sentencia sin precedentes, el pasado 3 de abril el jurado de este caso civil responsabilizó a Sánchez de Lozada y Sánchez Berzaín de las muertes de ocho personas en las protestas sociales registradas en Bolivia en 2003 y fijó compensaciones por 10 millones de dólares para los demandantes.
Notas Relacionadas
"El dictamen final del juez comprobó que mi gobierno actuó de acuerdo con la ley y que nunca tuvo intención de causar daño a nadie. Estoy seguro de que para todos quienes me acompañaron desde el gabinete y el gobierno, este veredicto confirma lo que siempre estuvo en nuestra conciencia", dijo Sánchez de Lozada este miércoles a través de un comunicado. "La evidencia demostró que el gobierno enfrentó la conmoción social en medio de una grave crisis económica, siempre buscando el dialogo y la resolución pacífica de los conflictos, mientras que muchos buscaban destruir la democracia".
La defensa había interpuesto durante los primeros días del juicio, que comenzó en marzo pasado en una corte de Fort Lauderdale, al norte de Miami, la moción amparada en la "Regla 50", en la que cuestionaba la evidencia presentada contra los exdirigentes bolivianos.

La "Regla 50" establece que un tribunal de primera instancia puede anular la decisión de un jurado si considera que no tuvo una base probatoria legalmente suficiente para decidir la responsabilidad de los demandados, que fue lo que pasó este miércoles.
Según Steven Schulman, abogado de Akim Gump, uno de los grupos de abogados de derechos humanos que ayudaron a los demandantes, el juez dijo que solo un testigo no dio suficiente evidencia para que sostenga el veredicto de que Gonzalo Sánchez de Lozada y Carlos Sánchez Berzaín mataron intencionalmente a más de 50 personas.
"La teoría de los demandantes era que los acusados tenían un plan para matar civiles de manera deliberada, pero la única evidencia de la existencia de ese supuesto plan era la declaración de Víctor Hugo Canelas Zannier", se puede leer en la argumentación del juez.
Por su parte Teófilo Baltazar Cerro, una de las víctimas que presentó la demanda contra Sánchez de Lozada y Sánchez Berzáin lamentó que la decisión de revocar el veredicto unánime del jurado no puede cambiar la verdad: "Hemos estado pidiendo justicia para nuestros familiares por más de 14 años y no tenemos planes de parar ahora. Apelaremos esta decisión", adelantó en un comunicado emitido por el Center for Constitutional Rights.
Después de que presenten la apelación, ambas partes tendrán una audiencia en aproximamente un año.
El juicio civil contra Sánchez de Lozada y Sánchez Berzáin considerado el primero sobre derechos humanos contra un exjefe de Estado, se amparó en la Ley de Protección a Víctimas de Tortura (TVPA, en inglés), que autoriza demandas en tribunales federales de EE.UU. por ejecuciones extrajudiciales.








