Otro periodista es baleado en Veracruz; es el quinto ataque contra el gremio en lo que va del mes

Un periodista mexicano fue atacado a balazos el miércoles en el convulsionado estado de Veracruz, azotado por la violencia del crimen organizado y que se ha convertido en el más letal para los comunicadores.

Armando Arrieta Granados es el quinto periodista mexicano víctima de la violencia en marzo; otros tres perdieron la vida: Cecilio Pineda, en el sureño estado de Guerrero; Ricardo Monlui, también en Veracruz, y Miroslava Breach en Chihuahua, norte del país. El martes también fue atacado a balazos un comunicador de la zona turística de Los Cabos, en Baja California Sur, donde su escolta murió.

Este mismo miércoles tres periodistas de la cadena de televisión árabe Al Jazeera fueron asaltados en el estado mexicano de Sinaloa. Una española, un británico y un mexicano fueron despojados de su vehículo, herramientas de trabajo y teléfonos móviles, y liberados ilesos cerca de un campo agrícola en la región.

Armando Arrieta, en estado de gravedad

De acuerdo con los reportes policiales, Arrieta Granados, jefe de información del diario La Opinión de Poza Rica y catedrático de la Universidad Veracruzana, fue atacado cuando llegaba a su domicilio.

"La fiscalía general del estado inició de inmediato una carpeta de investigación (...) Fue lesionado por proyectil de arma de fuego por una persona desconocida", dijo la fiscalía de Veracruz en un comunicado.

Arrieta, de 51 años se encuentra hospitalizado con heridas de gravedad.

El comunicador recibió varios impactos de bala en el cuello y tórax poco después de que cerrara la edición de La Opinión de Poza Rica, el periódico de mayor circulación y presencia en esa región del norte de Veracruz.

Personal de la Cruz Roja le dio a Arrieta Granados los primeros auxilios y luego fue trasladado a una clínica del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), donde los médicos lo reportaron como "muy grave". Más tarde, fue trasladado al Hospital del IMSS de la ciudad de Veracruz.

Sobre el estado de salud del periodista, el gobernador Miguel Ángel Yunes comentó que "está en situación delicada, tiene dos balas, aparentemente expansivas, una en el cuello y otra en el pulmón, su situación es complicada".

No obstante, la llegada de Arrieta Granados al hospital de la ciudad de Veracruz "ha permitido estabilizarlo y que ingrese en este momento al quirófano con signos vitales estables", añadió.

Al igual que varias zonas del estado de Veracruz, la región petrolera de Poza Rica enfrenta una guerra entre cárteles de la droga y un elevado índice de delitos como el secuestro.

En abril de 2005, el director general y propietario de la Opinión de Poza Rica, Raúl Gibb Guerrero, fue asesinado en esa región sin que hasta la fecha se conozcan los motivos ni los responsables del crimen.

Marzo, el mes más violento contra periodistas

Las agresiones contra periodistas en México han ido en aumento en los últimos años. Solamente en marzo tres fueron asesinados en estados del país donde la violencia se ha ido incrementando.

De acuerdo a Artículo 19, casi todas las agresiones contra periodistas han quedado impunes, y el 53 por ciento fueron presuntamente cometidas por funcionarios públicos.

"Los ataques contra periodistas son un reflejo en la crisis de derechos humanos que hay en el país", dijo Sandra Patargo, del programa de Protección y Defensa a periodistas de Artículo 19.

Los periodistas agredidos "son los que están cubriendo el aumento a la violencia, la corrupción y esta crisis de derechos humanos", agregó.

En casi 17 años, los ataques contra comunicadores crecieron paulatinamente hasta llegar a 103 en un periodo del 2000 hasta los últimos meses. El año pasado fue el más violento con 11 asesinatos.

Estados como Tamaulipas y Chihuahua, sobre la frontera con Estados Unidos, y Veracruz, con creciente violencia generada por cárteles de la droga y casos de corrupción de sus gobernantes, son los que registran más agresiones, dijo Patargo.

En uno de los casos más notorios, la periodista Miroslava Breach, del periódico nacional La Jornada, fue asesinada este mes cuando salía de su casa en Chihuahua.

No obstante, muchos de los periodistas no denuncian los ataques por desconfianza en las autoridades.