El gobernador de California detalló este martes el plan para reactivar la economía paralizada por la pandemia de coronavirus y levantar el toque de queda a nivel estatal, el cual comprende seis indicadores que se deberán cumplir de forma rigurosa antes de que los californianos puedan regresar a lo que será “la nueva normalidad”.
Coronavirus: mascarillas en público y distancia social permanente serán la nueva normalidad en California
El gobernador Gavin Newsom detalló que California debe cumplir con seis indicadores antes de reactivar la economía y levantar el toque de queda en el estado, algo que podría tomar "varias semanas o incluso meses".
Por:Víctor Solís
Video Gavin Newsom anuncia plan para reactivar la economía y levantar el toque de queda en California
Al hacerlo, Gavin Newsom enterró sin querer las esperanzas de miles o tal vez millones de residentes que, desde el lunes, cuando se anunció el proyecto conjunto con Oregón y Washington, anticipaban que la “apertura” sería más inmediata, tomando en consideración que las autoridades de salud de todos los niveles coinciden en que la curva de contagios de covid-19 se continúa aplanando.
En su rueda de prensa del mediodía, el gobernador explicó que el proceso para relajar la orden de confinamiento en casa y permitir la operación de nuevos negocios “llevará varias semanas” o “incluso meses”, y todas las decisiones que se tomen estarán basadas “en la ciencia y no en la política”.
Los indicadores
Antes de que las modificaciones al toque de queda estatal sean implementadas, el gobierno estatal espera ver un avance significativo en los seis parámetros claves del plan, que incluyen:
- Proteger a la comunidad a través de la aplicación de pruebas de forma masiva, rastrear los contactos de personas infectadas, aislar a los pacientes que lo necesiten y brindar el tratamiento adecuado a los casos confirmados.
- Prevenir los brotes y contagios entre la población en riesgo, con especial énfasis en las personas de la tercera edad, con discapacidades y la comunidad de desamparados.
- Aumentar la capacidad de hospitales para no colapsar el sistema de salud en el caso de futuros brotes, lo que incluye un incremento en el número de camas, personal y suministros tales como mascarillas y respiradores artificiales.
- Desarrollar tratamientos y terapias para los pacientes infectados, principalmente a través de alianzas con los sectores públicos, privados y académicos.
- Asegurar que los negocios, escuelas y guarderías de todo el estado cuenten con planes e infraestructura necesaria para mantener las normas de distanciamiento social y proveer equipo de protección a sus empleados.
- Tener protocolos sobre cuándo y cómo restablecer medidas preventivas como la orden de confinamiento en casa cuando sea necesario, para lo cual se necesitará de datos confiables que brinden una advertencia temprana a las autoridades de salud.
#COVID19’s impact on the economy, on poverty & on healthcare is hard to sustain. In the future, we will need to modify our Stay-at-Home order.
— Office of the Governor of California (@CAgovernor) April 14, 2020
Today, Governor @GavinNewsom lays out the road map to do that, including 6 key indicators that will be considered. #StayHomeSaveLives pic.twitter.com/LrshImUFUV
Los seis indicadores presentados por el gobierno estatal reflejan lo complejo que será reactivar la economía de California, catalogada como la quinta más potente del mundo, y retomar la vida pública como se conocía antes de la pandemia de coronavirus.
Sin ofrecer una fecha exacta, Newsom sugirió que en dos semanas estaría en condiciones de ofrecer una línea de tiempo para la reapertura del estado, pero solo si su administración nota un avance significativo en estos parámetros, como ya está se está viendo en el número de pacientes en unidades de cuidados intensivos, el cual ha disminuido en los últimos días.
“Vemos la luz al final del túnel (…) Ustedes han aplanado la curva (de contagios de coronavirus). El modelo ha cambiado”, dijo el gobernador con un optimismo mesurado durante su mensaje.
Pero el gobernador también dejó en claro que el éxito del plan dependerá en gran medida de los gobiernos locales, quienes serán los que determinen cómo y cuándo se implementarán los cambios que se hagan a nivel estatal.
En la Bahía de San Francisco, por ejemplo, seis de los condados que conforman el Silicon Valley, se adelantaron al gobierno de Newsom en decretar un toque de queda regional, y de igual forma podrían postergar cualquier decreto de la administración californiana.
Lo que cambiará
Aún no se sabe cuándo comenzará la “nueva normalidad” para California, pero a partir de este martes existe un bosquejo de cómo lucirá y cuáles serán algunos de los principales ajustes que los 40 millones de residentes en el estado tendrán que hacer a sus vidas cotidianas.
Para la California pos-pandemia, el gobierno prevé que los restaurantes y establecimientos para comensales reabran con un menor número de mesas, el uso de mascarillas en público será una práctica común y existirán nuevas oportunidades -tal vez a través de la tecnología- para mitigar la propagación del coronavirus.
En las escuelas, por ejemplo, el próximo ciclo escolar podría tener clases más reducidas para mantener el distanciamiento social, así como periodos de receso escalonados para limitar las aglomeraciones de estudiantes e incluso cambios en las actividades extracurriculares y deportivas que tengan como objetivo controlar el virus.
De acuerdo con Newsom, algunas de las modificaciones más significativas afectarán directamente a las personas de la tercera edad que viven en el estado, que de momento representan el mayor número de víctimas mortales del coronavirus.
El estado deberá determinar si los seis millones de adultos mayores de 60 años en California viven con familiares en viviendas que les permitan practicar el distanciamiento social permanente y cómo se pueden prevenir y controlar de manera inmediata los brotes de covid-19 en los asilos de anciano.
“En algún momento tendremos que modificar nuestro toque de queda. A medida que contemplamos reabrir algunas partes de nuestro estado, debemos seguir guiados por la ciencia y los datos, y entender las cosas serán distintas de antes”, dijo Newsom.
La línea de puntos rojos representa la curva de hospitalizaciones a causa del coronavirus en California, que se mantiene muy por debajo de los proyectado por las autoridades de salud estatales.
Imagen Gobierno de California
La curva del optimismo
Las suposiciones quedaron atrás y ahora están respaldadas por datos concretos: gracias a las estrictas medidas de distanciamiento social, California ha logrado aplanar la curva ascendente de contagios de coronavirus que temían pudiera desbordar el sistema de salud en el estado.
En el modelo de infecciones californiano, el número de pacientes de covid-19 hospitalizados se mantiene no solo debajo de la capacidad de los centros médicos, sino que también es menor al número de personas que las autoridades de salud proyectaron incluso con la implementación del toque de queda.
Newsom adelantó que es posible que California “no vea el peor escenario de la pandemia”, sin embargo, cada nota de optimismo estuvo acompañada de recordatorios de que “no hemos salido de la crisis” del coronavirus.
Datos actualizados del análisis del Instituto de Métricas y Evaluación de Salud de la Universidad de Washington ( IHME, por sus siglas en inglés), uno de los más utilizados en el mundo, estima que el pico de la pandemia en California ocurrirá el 17 de abril, cuando un total de 2,004 pacientes de coronavirus tengan que ser hospitalizados. Para entonces, el estado tendrá disponibles 26,654 camas en sus centros médicos, evitando así el temido desbordamiento del sistema de salud a causa de un repunte en las infecciones.
La proyección del IHME, que en la última semana ha sido ajustada a la baja en al menos dos ocasiones, adelanta que cuando se alcance el pico de la pandemia, los hospitales de California tendrán un excedente de más de 24,000 camas, mientras que, en las unidades de cuidados intensivos, se habla de que habrá 1,993 espacios disponibles para apenas 470 enfermos.
Si las normas de distanciamiento sociales continúan rindiendo frutos, como lo anticipa el gobierno estatal, a partir del 17 de abril la curva de contagios y hospitalizaciones por covid-19 comenzará a moverse cuesta abajo, según las proyecciones del IHME. Dos días después, el 19 de abril, llegaría el pico de víctimas mortales con 52, pero a partir de esa fecha comenzaría un declive vertiginoso que continuaría hasta principios de mayo.
Cuando la crisis termine, el IHME estima que California habrá reportado 1,483 muertes a causa del coronavirus, la última de ellas reportada el 13 de mayo. Ese mismo día, en todo el estado quedarán apenas poco más de 50 personas enfermas de covid-19 hospitalizadas, y para finales del mes la cifra cera de cero.
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