20 años de lucha contra el secuestro infantil

El Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados ayudó a la policía en más de 25,000 casos de niños desaparecidos en el 2018. El 4 por ciento eran secuestros familiares y menos del 1 por ciento eran secuestros no familiares. Los jóvenes menores de 18 años representaron para diciembre de 2018 el 34,8% de los casos, con 29.758 desaparecidos.

Imagen Univision

FILADELFIA-En el 2015 la etiqueta #every90seconds se convirtió en viral, acaparando la atención de los medios, celebridades, gobierno y sociedad civil. De acuerdo con la campaña de concienciación, cada noventa segundos un menor de edad se pierde o es secuestrado en Estados Unidos.

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La etiqueta tuvo su origen tras un estudio financiado en el año 2002 por el Departamento de Justicia y en éste se analizaron datos de 1999 de una variedad de fuentes, incluidos informes policíacos y entrevistas con padres e hijos.

Uno de los hallazgos del estudio fue que 797,500 niños se habían reportado desaparecidos en todo el país.

En 1999 había aproximadamente 72 millones menores de 18 años en Estados Unidos. Es decir, que uno de cada 90 se reportaron desaparecidos en un año: una cifra bastante alarmante.

Hay muchas razones por las que desaparece un menor: quizás se escaparon de su casa, o no regresan a tiempo a su hogar.

Pero ¿qué quería decir exactamente el estudio cuando afirmaba que un niño estaba "desaparecido"?

"El concepto de niño desaparecido ha sido extensamente incomprendido", aseguró el profesor David Finkelhor, uno de los autores del estudio y director del Centro de Investigación de Crímenes contra los Niños de la Universidad de Nuevo Hampshire.

Aunque estos hechos son preocupantes, son muy diferentes a los casos en los que un niño es secuestrado por un extraño en la calle.

" El número de niños que en realidad son secuestrados por extraños es bastante pequeño", añadió Finkelhor.

Sólo 115 de los 797.500 niños fueron sujetos a lo que Finkelhor y sus coautores definen como secuestro " esterotípico", entiéndase, fueron raptados por un extraño y retenidos durante la noche, quizás permanentemente, o llevados a al menos 80 kilómetros de distancia.

De hecho, casi la mitad de los niños registrados en el estudio eran lo que los autores llaman " desaparecidos benignos".

Esto significa que sus padres o guardianes pensaban que habían desaparecido, pero pronto regresaron a sus hogares.

En 2014, el Negociado Federal de Investigaciones recibió cerca de 600,000 informes de personas desaparecidas, la mayoría de las cuales tenían menos de 18 años.

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Pero esta cifra ha estado disminuyendo desde 1997, cuando se recibieron casi un millón de reportes de personas desaparecidas.

Video Reporte Especial: Lucha contra el secuestro infantil


El Centro Nacional de Niños Perdidos y Explotados reporta que alrededor de 800,000 menores son declarados como perdidos cada año, y de ellos, unos 160,000 no son encontrados con vida.

El 16 de septiembre comenzó a reportarse la desaparición de la niña hispana Dulce María Alavez de cinco años, vista por última vez en el Bridgeton City Park en Nueva Jersey.

El caso de Dulce se suma a las más de 85,000 investigaciones activas de personas desaparecidas, de acuerdo con el Archivo de Personas Desaparecidas del Centro Nacional de Información Criminal del FIB (NCIC, por sus siglas en inglés).

Así como Dulce, el 67% de los niños reportados como desaparecidos en Estados Unidos en 2018 pertenecían a una minoría étnica, según un informe del Centro Nacional para Niños Desaparecidos y Explotados.

Ser menor de edad, hispano y migrante en Estados Unidos complica contar con estadísticas certeras.

La situación de niños perdidos es complejo cuando se trata del problema inmigratorio, ya que muchos niños sin acompañantes han cruzado la frontera de Estados Unidos y han sido recibidos por la Oficina de Reubicación de Refugiados, quienes luego les han perdido el rastro tras asignar su custodia a parientes o tutores dentro del país.

En el año 2017 hubo 1,500 casos de niños perdidos bajo estas circunstancias.

El escenario puede ser variado pero las consecuencias para la familia en la que un miembro sufre un secuestro son devastadoras.

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