Perdonan condena de 11 años a hispana que sufrió un aborto por consumir drogas

Un tribunal de California decidió anular una condena de 11 años de cárcel a una mujer de origen hispano, Adora Pérez, a la que fue sentenciada tras sufrir un aborto espontáneo por consumir drogas.

En diciembre de 2017, Adora sufrió un aborto espontáneo en un hospital en Hanford, como consecuencia del consumo excesivo de metanfetaminas, según reconoció la joven.

En junio de 2018, y tras haberse declarado culpable por recomendación de los abogados que la asesoraban, Adora fue condenada por del delito de asesinato fetal y sentenciada a la pena máxima por este crimen de 11 años de prisión.

Este jueves, un juez del Tribunal Superior del Condado de Kings, en la región del Valle Central, decidió anular la sentencia y condena por este delito.

La anulación de la sentencia fue sustentada en que la declaración de culpabilidad de Pérez, en el juicio de 2018, debió haber sido considerada ilegal por el tribunal que juzgaba el caso.

El juez encargado de este último fallo dijo que la legislación sobre homicidio voluntario de California no se aplica para los fetos.

La modificación de esta ley fue hecha en 1970; sin embargo, esto no se consideró en el juicio de Adora Pérez.

Sin embargo, la joven hispana no saldrá libre tras esta resolución, pues, aunque la sentencia por el crimen de aborto fetal fue anulada, el tribunal ordeno que se restableciera el cargo original de asesinato.

Adora Pérez fue enviada de nueva cuenta a la cárcel, pero tendrá una oportunidad para salir libre en una audiencia en la Corte programada para el 6 de abril.

En esta instancia, la joven podría argumentar que la ley buscaba enjuiciar a personas a causa de un aborto espontáneo o muerte fetal, en lugar de hacerlo contra mujeres embarazadas.

Casos de aborto espontáneo por consumir drogas que se juzgaron distinto

Adora Pérez es una de las dos mujeres que fueron juzgadas en el Condado de Kings por sufrir abortos espontáneos por el consumo excesivo de drogas, pero con resultados muy distintos.

En 2019, Chelsea Becker también fue acusada por la Fiscalía de Distrito del Condado de Kings por el mismo crimen que dejó a Pérez en la cárcel.

Becker, una mujer blanca, sufrió un aborto por consumir metanfetaminas en exceso, la misma droga que causa el aborto de Pérez.

La diferencia es que el caso de Becker fue desestimado por un juez en mayo de 2021 y la joven quedó en libertad.

Pérez tendrá una nueva oportunidad para revertir la sentencia que la mantiene en la cárcel desde hace cuatro años.

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