Hay cosas que solo suceden en las películas...
¡Ya quisiéramos que estas 7 situaciones románticas ocurrieran en la vida real!

A veces idealizamos tanto el amor porque tenemos una gran influencia proveniente de la ficción del cine. Y cuando empezamos una relación con un chico, soñamos despiertas que algo de lo que vimos en las películas pueda ser real.
Hay muchas más, pero podemos hablar con propiedad de estas 7 diferencias entre el amor de cine y el amor real.
#1 Una demostración de amor única

Es tradicional que en las películas románticas haya una escena única, que sea esperada, la que nos quita un ¡Awwww! En la gran pantalla siempre un protagonista hace algo grandioso por otro, y es lo que nos suele calar hondo mientras lo vemos.
En cambio, en la vida real esto rara vez ocurre, y por otra parte, sería más natural que las demostraciones de amor fueran a diario.
#2 Amor en tiempo récord

Los personajes de las películas se enamoran muy rápido, se casan, tienen hijos y todo en menos de dos horas... claro, no podría durar más o la película sería eterna.
Pero en la vida real es necesario que transcurran unos cuantos meses antes de tomar decisiones importantes, ¡nadie se casa tan seguro de su decisión con una persona que acaba de conocer!
#3 Mucho romanticismo

Por lo general, en las películas, el romanticismo se lleva a un extremo que lo hace percibir tan delicioso como irreal. Pero en la vida real, el romanticismo suele tener una justa medida, aunque si hay algún que otro romántico puede ser que esta faceta se vea acentuada en su relación.
#4 Una emoción tras otra
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En las películas es como si las personas estuvieran juntas a cada instante, como si no tuvieran que ir a trabajar, ir a estudiar, etc. Pero en la vida real, compartimos en pareja un gran momento pero al otro día tenemos nuestras obligaciones que cumplir y no podemos llevar a nuestra pareja.
#5 Viva la prosperidad
Es raro ver una película en donde los protagonistas vivan en casas muy simples o cocinen a diario o vayan a comprar al supermercado tal y como suele ocurrir de verdad. Por lo general se los ve comiendo en restaurantes glamorosos, vestidos de forma atractiva y conduciendo buenos coches y viviendo en casas grandes, amplias y bonitas.
#6 Todo muy bien puesto
Desde la decoración de cada sitio hasta los actores suelen estar muy bien vestidos y maquillados, entre otras cosas, es como el mundo perfecto. Hasta cuando la escena se trata de levantarse a primera hora de la mañana, o incluso cuando lloran, ¡sus rostros están deslumbrantes!
En la vida real... (no hace falta explicarlo).
#7 El final feliz

Es lo que a todas nos gusta, rara vez una película termina con un final triste. Las parejas de película acaban juntas, todo se arregla o bien cada cual logra ser feliz por separado, pero la sensación que nos queda luego de verla suele ser de bienestar y agrado porque terminó bien. En la vida real, sabemos que esto no siempre es así.
¿Qué piensas respecto a estas diferencia entre el amor de cine y el amor real? ¿Crees que las historias de amor del cine son muy exageradas? ¿O será que con el tiempo nos hemos puesto menos románticos?








