¿Estás listo para abrazar?
¡Por más muestras de cariño! Esto le pasa a tu cerebro si recibes un abrazo, ¡y es magnífico!

Me encanta abrazar y que me abracen. Sin duda se siente muy gratificante. Pero no es solo una muestra de cariño gigantesca, es mucho más…
Sucede que cuando alguien te abraza, en tu cuerpo pasan muchísimas cosas. La revista Developmental Review, sugiere que los abrazos pueden impulsar las hormonas de la felicidad, bajar la presión arterial y disminuir la sensación de estrés.

El contacto con otra persona activa los receptores de presión, los “corpúsculos de pacini” y envían señales al nervio vago, una parte de nuestro cerebro. Este sector cumple una importante función en la presión arterial. Entonces, cuando nos abrazan, todo nuestro cuerpo comienza a trabajar enviando señales y reduciendo la presión arterial. Esa es la razón por la que un abrazo puede sentirse tan gratificante y tranquilizador.
Pero no es solo eso, nuestro cerebro, además de reducir la presión arterial, libera dopamina. ¿Qué es?, te preguntarás. Es un neurotransmisor al que se lo llama como “la hormona del placer”. Eso hace que experimentemos sentimientos de satisfacción y de seguridad.

Y algo más… según Scientific Reports un abrazo puede reducir el estrés. Esto se debe a que nuestro cuerpo responde ante este gesto reduciendo la cantidad de cortisol, que es denominada la “hormona del estrés ”.
Ya sabes… aceptar y dar abrazos es la clave. No solo es una forma de demostrar y recibir cariño, sino también de cuidar nuestra salud.








