Se dice que «el amor no se busca, llega». Sin embargo, ¿por qué no ayudar al destino a que nos encuentre? Esto no quiere decir que debas correr a Tinder o a la cafetería de moda en la que tus amigas aseguran que solo acuden «galanes».
Esta es la etapa del año en la que debes ligar para encontrar al amor de tu vida

Encontrar el amor es más sencillo: Sólo elige un lugar que te gustaría conocer y las cosas que deseas probar y, ¡vete de vacaciones!
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¿Por qué viajar te abre al amor?
De acuerdo con una investigación de la Universidad de British Columbia, todo está en la estimulación física (no es igual a la sexual) que provoca el conocer nuevas cosas. Esta sensación puede inducir a una atracción romántica. ¡Claro! Siempre y cuando el acompañante sea de tu preferencia de género, edad, clase social y hable el mismo idioma.

En el mismo estudio también se encontró que durante las vacaciones el cerebro secreta dopamina (la hormona de la recompensa). Además de sentirte mejor, te hace más empática a un posible pretendiente.

No sólo puedes encontrar el amor, también recuperarlo
¿Entre más se conocen, la pasión se evapora? Aunque podrías creer que es solo tu «inseguridad», lo cierto es que han dejado de ser interesantes el uno para el otro. ¡Aquí unas vacaciones harían magia!

El motivo, realizan una autoexpansión. Para Virgil L. Sheets esto significa que, como pareja, empiezan a integrar nuevos comportamientos y cualidades. Se dan la oportunidad de actuar diferente en la intimidad, incrementando la pasión.

En palabras más concretas, durante las vacaciones, la pareja está en un estado de bienestar total. Se vuelven a conquistar.
Ya no hay excusa para no descansar un par de días, ya sea sola o en compañía. ¿No crees?
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