Encontré novio en Internet sin sufrir catfishing en el intento

Debo decir algo que me parece muy importante antes de compartirles mi historia: cuando conocí a mi novio en Internet yo para nada estaba buscando una relación amorosa. Es más, yo andaba con otra persona en ese entonces, y él también.

Ése es el mejor consejo que podría darle a alguien en busca del amor: no lo busques.

Las mejores relaciones a largo plazo (pienso yo) son las que forjas con alguien que, antes de ser tu novio o esposo, es tu amigo. A tus amigos los conoces como nadie, les tienes confianza, los buscas para salir, no quieres nada de ellos más que su amistad. En el fondo eso mismo debería tener un romance. Además de que entre más sólidos los cimientos, más resistente el edificio, ¿no?

En fin. Conocí a... llamémosle aquí "Señor Pan" (sistema de protección de testigos, jaja) en Last.fm, una página de música. Ya saben cómo es esto: abres una cuenta nueva en algo y te entra la locura por agregar amigos. No sé cómo llegué al perfil del Señor Pan, pero teníamos una compatibilidad musical alta y se veía buena onda en sus comentarios. Así que zaz, lo agregué.

Platicamos un par de meses con comentarios esporádicos en ese sitio hasta que un día me dijo que si quería, mejor lo agregara a Facebook, porque ya no se metía a Last tan seguido. A partir de ese momento empezamos a platicar muchísimo más seguido. Era muy fácil hablar con él, teníamos mucho en común y no nos callábamos nunca. Pasamos noches en vela platicando en Messenger hasta las 5 o 6 de la mañana (los dos somos lechuzas).

Cuando terminé con mi exnovio, estaba en pésimo estado, pero el Señor Pan siempre estuvo conmigo, escuchándome en todo momento. Tiempo después me confesó que nunca quiso dormirse antes que yo, porque no quería dejarme sola.

Una noche me confesó que yo le gustaba, pero que no me lo decía para conquistarme ni nada, porque si por algo no se daba nada entre nosotros, él no quería perder mi amistad. Considero que ese fue un momento clave en nuestra historia, porque ahí supe que me quería por lo que yo era, no por lo que él quisiera obtener de mí.

Yo seguía en un estado emocional súper inestable y no quería tener una relación en ese momento, ni siquiera pensar en ello. Él lo entendió y seguimos conversando como si nada.

Casi un año después de amistad, nos conocimos en persona al fin. Los dos queríamos ir a un concierto de Scorpions, pero no teníamos quién nos acompañara. —"¿Y si vamos juntos?", —"Pues va, vamos".

Por un momento tuve las razonables dudas: "¿Y si me catfishean? ¿Y si no es él? ¿Y si me secuestran y me sacan mis riñones?". En esos instantes de duda, siempre hay que considerar algunos factores:

• Que su perfil en línea se vea real: que otras personas le comenten, que salga en fotos de sus amigos, que comente en otras páginas... Hay varios indicativos para comprobar si se trata de una persona real o no. Si algo te parece sospechoso... mejor no, sigue tus instintos.
• Conocerse el tiempo suficiente antes: entre más tiempo dispongas para comprobar si algo te huele raro, mejor.
• Verse en un lugar público: entre más gente alrededor, menos posibilidades hay de que te hagan algo horrible.

La situación con el Señor Pan cumplía todos los requisitos. Además, mi conclusión fue: Yo lo agregué a Last y a Facebook. Si alguien fuera un estafador aquí, sería yo. Jaja.

Nos conocimos un sábado en el metro para ir a comprar los boletos para el concierto de Scorpions. ¡Hablamos por HORAS! Fue exactamente como nuestras pláticas en línea. La química fue muy evidente. No quería regresar pronto a mi casa.

A partir de ese día hablamos tooodavía más, por teléfono y mensajes.

Dos semanas después nos convertimos en novios. Me preguntó: "¿Te gusta el pan?", le dije que sí. Me preguntó: "¿Quieres ser mi novia?", y le dije que sí.  En dos meses cumpliremos cinco años juntos. Jamás hubiera creído que hacerme un perfil en Last.fm sería una de las mejores decisiones que he tomado.

Pienso que en el amor tanto en línea como en persona (y en todo en esta vida, la verdad) lo que llega a nosotros es una combinación entre tus decisiones y un poco de suerte. Lo mejor que podemos hacer es ser auténticos, no esperar que las cosas sucedan de determinada manera y tener una pisquita de desconfianza (hay que cuidarnos, oigan).

Cualquiera que sea el caso, no se desesperen. En ningún lado está escrito que debemos conocer al amor eterno de nuestras vidas por siempre antes de los 30 o la edad que sea. ¡Ánimo! El Internet es una gran opción si aprendemos a aprovecharlo. (Y si también eres introvertido como el Señor Pan y yo ¡es buenísima! Jaja.)

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