Todos sabemos que no existe un manual para aprender a ser madre ni padre, pero siempre nos dan consejos a la hora de ser madres primerizas, datos y hasta pequeños tipos de cosas para hacer y cosas a evitar. El hecho es que nada de eso realmente te prepara para el gran cambio que vas a sentir en tu vida una vez que el niño comience a formar parte activa de tu vida diaria.
Se necesita informar mejor a las madres primerizas

La alegría no se quita, pero con ella vienen un montón de demandas por parte del niño que no siempre estamos listas para enfrentar y lidiar con ellas. En un estudio reciente realizado en Australia a 151 mujeres se descubrió que el 35 por ciento de ellas declaró no haberse sentido preparada para la demanda física que implicaría el parto y el después de eso.
Ademán un 20 por ciento contó que no estaba preparada emocionalmente para afrontar la experiencia de vida con su hijo. El caso es que muchas madres primerizas fueron investigadas y la mayoría declaró que hubiera deseado recibir más información sobre el embarazo pero especialmente sobre su vida una vez que el bebé nació.
Casi la mitad de las mujeres encuestadas dijo que no estaba para nada preparada en relación a el gran cansancio y todo lo que el bebé le demandaría. Lo más recomendable para solucionar este problema es la reunión con madres que ya tengan experiencia y que puedan aconsejar con propiedad a las futuras madres. Se necesita no enfocarse tanto en el parto quizás y pensar más en los cambios que van a venir en la vida, como al fatiga y los cambios físicos y emocionales.
Vía | yahoo







