Hablar de ansiedad en estos días es algo común, pero una cosa es sentir ansiedad en determinadas situaciones como es normal en el ser humano y otra es padecer de ansiedad. ¿Qué los hace diferentes? En términos simples, cuando notas que ya no puedes controlarlo, ya sea en intensidad o en frecuencia.
¿Eres ansiosa y no lo sabes? 5 comportamientos que te delatan

La ansiedad puede ser un factor secundario a otro padecimiento, por ejemplo una enfermedad llamada Addison que, entre muchas cosas, afecta la producción de adrenalina y cortisol (la hormona del estrés). Esta afección provoca que quien la padece se sienta siempre alterada, pues su cuerpo no es capaz de regular la producción de dichas sustancias.
Otra causa puede ser la hipoglucemia, donde la falta de azúcar (que es el alimento principal del cerebro), provoca una serie de sensaciones entre ellas ataques de pánico. No obstante la ansiedad también puede presentarse como un factor único, lo importante es lograr identificar cuando se tiene este padecimiento y actuar.
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Escuchando al cuerpo
La ansiedad puede presentarse en episodios aislados o de manera crónica, solamente quien la padece puede determinar si esto es normal o tolerable. Algunas de las señales que nos indican se está sufriendo de ansiedad pueden estar dentro de las siguientes:
#1 Impaciencia

La impaciencia es algo que caracteriza a la sociedad del nuevo siglo, al parecer todos llevan prisa y esto nos hace menos tolerantes; sin embargo, cuando eres una persona que padece de ansiedad, la impaciencia es más que sólo querer apresurar las cosas.
En un caso de ansiedad hay desesperación y ésta por lo regular viene acompañada de preocupación. No sólo te quieres retirar del lugar, sino que la estadía es eterna y muy incómoda.
#2 Reacciones físicas

Muy ligado a todas las manifestaciones que se presentan en una persona con ansiedad están las reacciones físicas: sudoración excesiva, palpitaciones, dilatación de pupilas, ruborización, calambres o entumecimiento de extremidades, cambios de temperatura, ente otras.
Como mencionaba anteriormente este tipo de reacciones son normales siempre y cuando vayan de acuerdo a la situación, ya que esto es una respuesta del cuerpo ante situaciones de peligro; pero si para ti se activan al escuchar sonar el teléfono, entonces podrías tener un problema de ansiedad.
#3 Insomnio

Otra de las principales características de la ansiedad es el insomnio, el cual se traduce como incapacidad para conciliar el sueño o dormir de manera profunda y continua.
La mente sigue trabajando y cuando llega la noche tu subconsciente no logra desconectarse. Si esta situación se ha vuelto parte de tu vida entonces es hora de considerar buscar ayuda profesional.
#4 Enfermedades

¿Te enfermas sin razón aparente y de forma continua? Una persona ansiosa somete su cuerpo a un desgaste constante , se gasta energía de más, siempre hay tensión muscular, sobre producción de ácido gástrico, desgaste calórico, cambios en la presión, etc.,
Todo esto enferma al cuerpo y las consecuencias son evidentes detrás de esa gripa semanal, la gastritis que no te deja y las migrañas de la tarde.
#5 Pensar demasiado

Por último, pero no por eso menos importante, está el pensar demasiado. Si no puedes evitar pasar y repasar cualquier tema, por más simple o complicado que sea, entonces podrías estar pasando por un caso de ansiedad. ¿Te identificas con algunos de estos síntomas?
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