Al momento de pensar cuántos hijos nos gustaría tener consideramos detalles como: ¿Queremos que crezcan en una familia numerosa? o ¿Cuántos podremos mantener con nuestro salario? Seguro los miembros de realeza británica no piensan en esto último para decidirse, pero incluso así el príncipe Harry y Meghan Markle no tendrán muchos bebés en el futuro cercano, ni lejano. La razón está en su consciencia ecológica.
Meghan y Harry hablaron sobre darle un hermanito a Archie y su decisión merece tu atención
Por:Lilian Pérez
Son diversos los problemas que le preocupan a los Duques de Sussex. Por eso en su Instagram cada mes se lo dedican a una causa social que requiere de nuestra atención inmediata. En junio los reflectores se los llevó la comunidad LGBT+ y en julio fueron para el cambio climático: el verdadero motivo por el cuál los esposos planean sólo tener un hijo más, además de Archie.
Fue el príncipe Harry quien compartió esa resolución en una entrevista. Pero fue curioso, porque él no era el entrevistado, sino quien hacía las preguntas. Dentro de la edición especial de Vogue UK editada por Meghan, el hijo de Lady Di conversó con la primatóloga Jane Goodall.
Ambos platicaron acerca del impacto negativo que los humanos han tenido sobre la Tierra y lo importante que es detenerlo y revertirlo. El Duque hizo énfasis en que debemos reconocer que ya estamos en medio de un torbellino de problemas, por lo que necesitamos actuar con inmediatez. La Dra. Goodall le dijo que seguramente ahora esas cuestiones le preocupaban más, al haberse convertido en padre hace apenas unos meses.
Harry explicó que siempre se ha sentido conectado con la naturaleza, y que al conocer personas en otras partes del mundo ha entendido lo vital que es proteger al planeta. Pero ahora que Archie llegó a su vida, el asunto le apremia aún más. Ahí fue cuando mencionó que espera tener más hijos, a lo que Jane respondió que ojalá no quiera muchos.
«¡Dos, máximo! Siempre he pensado: este lugar es prestado. Y, con seguridad, al ser tan inteligentes como lo somos todos, o tan evolucionados como se supone que somos, deberíamos ser capaces de dejarle algo mejor a la próxima generación».
Aunque es perfectamente válido que una persona anhele tener bebés, estamos en un punto de la historia en donde es necesario pensar en el futuro tanto de los que ya estamos aquí como de los que podrían llegar. Se estima que para 2050 habrá más plástico en los océanos que peces y la sobrepoblación es un factor que empeora la contaminación ambiental. Por ello es que decidir tener menos hijos (o ninguno) se vuelve un acto de solidaridad con la Tierra y con el resto de la humanidad.
«¿Qué podemos aprender de la naturaleza? Las personas siempre dicen: "Ahí está la naturaleza, y luego estamos nosotros". Pero somos parte de ella —nosotros somos naturaleza. A menos que reconozcamos que somos parte de este ciclo, entonces siempre estaremos peleando contra él».
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