
Sin duda alguna, los programas de traducción son los más demandados por los usuarios. Hoy en día la paleta de estas aplicaciones es enorme, pero no todas ofrecen la misma calidad ni responden a las verdaderas necesidades que se requieren. Hoy presentamos tres aplicaciones para traducción de idioma que pueden ayudarnos y que además ofrecen un servicio de alta calidad.
Google Translate
Google Translate es sin duda la aplicación más conocida para traducir texto. Basta con entrar en su web para obtener la traducción buscada. La aplicación detecta el idioma y más de 70 lenguas de entrada y de salida diferentes. Si deséas traducir un sitio web, basta con indicar su URL. Se puede añadir la extensión Google Translate al navegador Chrome para traducir las páginas web de tu elección con solamente un clic.
El servicio ofrece también la traducción de un documento que debes importar a la web. La aplicación soporta muchos formatos, como PDF y ficheros Word. Si buscas traducir un documento en papel, puedes usar la aplicación móvil: se puede traducir en un momento las palabras de una foto, y es algo muy práctico.
WorldLingo
WorldLingo es una aplicación sencilla para traducir un documento. También ofrece diferentes funciones: traducción del texto, del sitio web y del email. Sin embargo, sólo se pueden traducir 500 palabras como máximo con la versión gratuita. La aplicación es muy fácil de manejar y soporte diferentes tipos de ficheros (PDF, Word...).
La versión traducida de vuestros documentos es cargada en formato TXT, mientras que Google Translate se contenta con presentar la traducción en una pestaña de la pantalla. La ventaja de esta aplicación es que se puede elegir el sector, para adaptar la transcripción de vuestro documento en un lenguaje técnico coherente. La única desventaja es que sólo sirve para documentos de un tamaño no muy grande.
Traducir un documento Word desde Microsoft Word
Si queréis traducir un documento Word, conviene saber que un pequeño truco de Word lo permite en unos cuantos clics. Se trata de algo práctico, puesto que no tienes que pasar por una aplicación externa para obtener la traducción. Basta con abrir la pestaña "Diccionario", y luego pinchar sobre el botón "Traducción" para traducir el fichero completo, únicamente el texto seleccionado, una frase o una palabra.
Evidentemente se puede elegir el idioma de entrada y de salida, y traducir rápidamente un fichero con los últimos parámetros usados. Si decides traducir el fichero completo, una página web se abre con la transcripción de vuestro documento. El resultado es bastante aceptable, a pesar de que se obligue a usar Internet Explorer para obtener la traducción.
En general, estas aplicaciones "automáticas" disponibles en Internet permiten comprender un documento escrito en otro idioma; pero traducir un documento escrito en un idioma comprensible requiere necesariamente ciertos retoques.