La salamandra es uno de los animales que más historia tiene, debido a que por 1500 años las personas creyeron que vivían en el fuego. Durante la Edad Media su poder le dio un sitio especial, sobre todo entre los alquimistas. Sin embargo, aunque hoy en día existen diferentes tipos de salamandras, ninguna tiene los poderes de este ser mitológico.
Aristóteles fue el primero en decir que las salamandras resistían el fuego y de hecho, podían extinguir las llamas. Plinio el Viejo documentó como en un intento de probarlo tiró a uno de estos animales al fuego, pero no sobrevivió. Aún así, el mito persistió por mucho tiempo.
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Plinio falló en mostrar lo contrario en su libro Historia Natural, donde incluso confirma algunos de los increíbles poderes de este animal. 500 años más tarde, San Isidoro de Sevilla todavía confirmaba que resistía el fuego y que su veneno era tan fuerte como para contaminar un árbol entero de frutas, o un pozo de agua.
Leyendas sobre la salamandra de fuego
Una de las historias difundidas cuenta que todo un ejército de 4 mil hombres y 2 mil caballos de Alejandro El Grande, murió luego de tomar agua de un río donde se bañó una salamandra. Al parecer todas estas historias se basan en la salamandra de fuego europea, la cual realmente existe y es de color negro y amarillo.
La salamandra europea es venenosa, segregando una neurotoxina que tira sobre sus enemigos. Esta sustancia puede causar irritaciones fuertes, pero nunca matar a un ejército entero o envenenar un árbol.
Leonardo Da Vinci fue una de las personas que contribuyó a este mito, agregando luego que carecían de sistema digestivo y que su alimento provenía del luego. Paracelso lo confirmó y elevó a este animal al nivel de uno de los elementos fundamentales.
¿De dónde viene la leyenda de la salamandra resistente al fuego?
A estos animales les encanta vivir en troncos de árboles, y es allí donde estaban muy tranquilos cuando alguien decidía hacer una fogata. Al tirar los troncos en el fuego ellas emergían como si salieran del fuego mismo, dando lugar al conocido mito.
La zoología avanzó mucho desde entonces derribando todos estos mitos, aunque la salamandra sigue siendo un símbolo del fuego y de la resistencia a él. Puede verse en numerosos logos e imágenes, aunque ahora solo sea un animal normal.
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La salamandra real
Sin embargo, las salamandras existen y hay aproximadamente 500 clases de ellas. Las más grandes están en Japón y China donde llegan a medir 1,5 metros. Aunque tienen apariencia de reptiles, son anfibios más relacionados con los sapos y las ranas.
Las salamandras son animales fascinantes que aún podemos observar en la mitología de la literatura y el cine. Aunque existen y hay muchas, también tiene a su pariente mitológico que por años se creyó real.