El mejor halago que toda mujer puede recibir es: "aparentas menos edad de la que realmente tienes". Escuchar esto es como una medicina ante cualquier mal día; en definitiva nos saca una sonrisa de inmediato.

¡Ahh, las arrugas! Esas líneas –en apariencia inofensivas– que rompen la suavidad de nuestro rostro y pueden terminar por agregarnos 20 años encima. ¿Por qué recórcholis aparecen? ¡La respuesta es bien sorprendente! La verdad es que el solo pasaje del tiempo no tiene toda la culpa...

Hoy iremos más allá de lo obvio. No queremos ya insistir en datos que ya sabes de memoria, como que "debes aplicarte protector solar todos los días". Hoy, entonces, te mostraremos hábitos no tan conocidos, pero igualmente efectivos para prevenir el envejecimiento prematuro.

La piel del contorno de ojos tiene ciertas características que hacen del área una de la más delicadas del cuerpo. Pero ya hablamos de lo sensible que es esta zona y de sus problemas más comunes: arrugas, bolsas y ojeras.

Nuestra piel es un fiel reflejo de lo que somos y hacemos. El paso del tiempo, la exposición solar y el cansancio son factores que contribuyen a su degeneración y que generan daños estéticos difíciles de combatir.

A las mujeres no nos gustan las arrugas, y día a día probamos diferentes tratamientos para ganar la batalla contra el envejecimiento. Por eso, hay en el mercado miles de cremas, tratamientos y productos para rejuvenecer el rostro de forma rápida y fácil.