Stephen Paddock

Campos trabajaba como guardia de seguridad y, desarmado, se dirigió a la habitación donde Paddock estaba cometiendo la masacre. El sheriff del condado calificó su actuación como heroica, pues estando herido en la pierna, condujo a las autoridades hasta la habitación y ayudó a varias personas a ponerse a salvo.

El alguacil del condado Clark dijo que el autor de la masacre tenía intenciones de escapar y que no dejó una nota suicida en la habitación. Este jueves también se conoció que Paddock rentó una habitación en otro hotel de Las Vegas.

Nuestro reportero Pedro Ultreras estuvo en una habitación en el piso 30 de ese mismo hotel, desde donde pudo ver la perspectiva que tuvo Paddock para cometer su atroz crimen. En el lugar de la masacre todavía están los objetos de las personas que acudieron al concierto, tal y como las dejaron.

Tiffany Huizar entró en pánico cuando escuchó el ensordecedor ruido de la balacera de Las Vegas. Asegura que comenzó a correr para huir, pero sin quererlo se dirigió hacia donde estaba el pistolero. Cuando se detuvo, se dio cuenta de que tenía la camiseta manchada de sangre.

Los bidones estaban a unos 1,000 pies de distancia de donde se celebraba el concierto. Por otro lado, la novia del atacante fue interrogada por las autoridades y, a través de un comunicado, dijo que Paddock siempre fue una persona cariñosa.

La policía de Chicago investiga reportes sobre una presunta reservación hecha por Stephen Paddock, autor de la masacre en Las Vegas, de dos habitaciones en un hotel de Chicago con vista al reconocido festival musical.