No tenerle cariño a BB-8 después de ver Star Wars: The Force Awakens es, sin duda, algo imposible para cualquier persona en el mundo. Su carisma y capacidad comédica sin emitir ni una palabra hace que, desde ya, sea el Androide más querido de toda la saga.

No sabemos si Jennifer Lawrence y su protesta respecto a los bajos sueldos de las actrices de Hollywood tuvo algo que ver o no, pero lo que sí es cierto es que las intérpretes femeninas llevan encabezando los repartos de grandes producciones con mayor asiduidad, compitiendo contra unos camaradas masculinos que ya no son exclusividad de la industria.

¿Hay algo mejor que un ramo de flores para conquistar a una chica? Sí, un buquet con figuras de Star Wars, o al menos así lo es para las fanáticas de la saga más famosa del Cine, cualidad con la que cualquier mujer suma puntos para muchos chicos.

Probablemente estés familiarizado con el término grindhouse, al menos si alguna vez escuchaste hablar sobre el lanzamiento conjunto de Planet Terror y Death Proof, las películas de esos dos fanáticos del cine clase B y la bizarrez cinematográfica que son Quentin Tarantino y Robert Rodríguez.

Si bien difícilmente los millones de personas que convirtieron a Star Wars: The Force Awakens en una de las películas más taquilleras de todos los tiempos cumplen en su conjunto con el estereotipo nerd, éste no deja de ser el tipo de público más asociado a la Guerra de las Galaxias como fenómeno cultural.

Experto en tecnología, Juan Guevara, explica por qué la fiebre de Star Wars ha facilitado a piratas cibernéticos acceder a información confidencial de seguidores de esta famosa película