Las relaciones de pareja no siempre funcionan y atravesar la ruptura es la peor parte, sobre todo cuando nos toma desprevenidas. Pero aún más difícil puede llegar a ser la ruptura en una relación a distancia.

Las relaciones de pareja son complejas y a veces el amor no lo puede todo. Sin embargo, después de que logramos entender que debemos terminar con la relación, tenemos unos momentos en los que el arrepentimiento nos quiere vencer y no nos deja ver las cosas como realmente son.

Cuando iniciamos una relación no estamos pensando en que se va a terminar en cualquier momento, pero a veces pasa que terminar una relación es necesario cuando ya no es saludable ni feliz. Tomar la decisión de terminar una relación con alguien que has compartido grandes momentos de tu vida no es para nada fácil y menos aún llevarlo a cabo.

Nadie se casa esperando que la relación termine y por más que se intente con todas las ganas, a veces la pareja ya no puede seguir porque para ninguno de los dos es fácil continuar. Y entonces el divorcio se vuelve la única opción posible.

Cuando una relación se termina, olvidar a nuestra ex pareja no es algo fácil, ni rápido. Por lo general, es todo lo contrario: una etapa difícil y que cuesta mucho llevarse a cabo. Pero una vez que la decisión está tomada y hablada entre la pareja, lo mejor es que no haya vuelta atrás.

Hace unos días me encontraba recordando un programa de TV sobre cómo salir airosa después de una ruptura amorosa. Me puse a pensar lo importante que es esta etapa y el cómo la tomemos, e incluso cómo nos comportemos, ya sea para no volver a caer con esa persona cuando nos llama y pide perdón o bien para no hundirnos en la depresión.