Hoy en día, vivimos sumergidos en estrés. El trabajo, las redes sociales y la gran cantidad de tecnología disponible contribuyen a ello. Por esta razón, las adivinanzas no solo son una opción divertida para entretenerse, también contribuyen a disminuir el estrés y a incrementar nuestra capacidad de reflexión. Por un rato, nos permiten alejarnos de las situaciones cotidianas estresantes y enfocar toda nuestra atención en resolver un problema con simplemente nuestro ingenio.

Muchas personas desalientan el conteo con los dedos en los niños por temor a que impida el aprendizaje.

Nos encantan los acertijos. Pero mejor aún son aquellos que no solo nos hacen pensar, también tienen algo más para decirnos. En este caso, adaptamos un acertijo diseñado por Ben Ambridge. En el mismo parece haber una correlación entre las soluciones y nuestro nivel de creencia en la religión.

No importa cuánto cuidado tengamos, lo más probable es que al mes al menos un par de tus calcetines se quede huérfano tras lavar tu ropa y no es que un duende se los lleva, sino que tu los organizas mal.

En una escala del 1 al 10, ¿qué tan feliz eres?

Conejos, monos, chimpancés, etc., animales no humanos que deberían estar libres, pero que pasan sus días en jaulas de laboratorios y no solo para estudios médicos, sino que son utilizados para probar cosméticos.