No es novedad que a los niños les encantan los dulces y que tienen todo el derecho a comerlos, pero lo cierto es que siempre es mejor lo que hagamos en casa. Como en este caso que preparamos unas deliciosas y sencillas galletitas de nuez, ideales para tener siempre a mano y para llevar al cole.

El glögg es la bebida tradicional con que en Suecia se espera el año nuevo. Es ideal para las fiestas, si es que viven en el hemisferio norte, y por ende durante esas fechas se pone un poco frío. De todos modos, nada obliga a que deba limitarse a las fiestas… por ende si viene un fresquito, recíbanlo con un glögg… van a ver como su cocina se llena de aromas deliciosos mientras lo estés preparando.

Hoy ya es Noche Buena, pero seguramente aún no te has puesto a cocinar para la cena. Lo bueno es que aún queda un montón de tiempo para hacer nuevos platos. Pero más que nada, no nos podemos olvidar de los pequeños de la casa.

Al que le gustan los helados y le gustan los postres, los postres helados le gustan todavía más. Son la conjunción perfecta de lo rico y lo rico, para dar como resultado algo mucho más rico: más rico, más dulce y más helado.

A cualquier chico le gustan las galletitas, ¿verdad? Es que no hay nada más rico que esas recetas dulces tan sencillas y rápidas de hacer.

Ahora que se vienen las fiestas, me he acordado de una vieja tía que antes de juntarse la familia, hacia alfajorcitos de maicena para la familia entera. Se había convertido en una tradición, y para los que eramos pequeños, la verdad es que nos encantaba.