Luzerne y Lackawanna, dos condados pobres de Pennsylvania, votaron abrumadoramente por Donald Trump en las elecciones presidenciales en medio de su promesa de no dejar de lado a quienes habían sido "olvidados" en Estados Unidos.
El presupuesto de Trump da la espalda a zonas rurales que le ayudaron a ganar la presidencia
El presupuesto propuesto por el mandatario quita el dinero que reciben agencias como Appalachian Regional Commission, que impulsa proyectos de desarrollo en condados como Luzerne y Lackawanna en Pennsylvania. Ese fue precisamente uno de los estados del corazón industrial que permitieron que Trump acumulara los votos electorales necesarios para hacerse con la presidencia.
Donald Trump en un evento de campaña en Geneva, Ohio, el 27 de octubre de 2016.
Imagen Jeff Swensen/Getty Images
Esos dos condados forman parte de los 202 condados en Pennsylvania, Michigan y Wisconsin que le ayudaron a acumular en el corazón industrial del país los votos electorales necesarios para llegar a la Casa Blanca. Pennsylvania le concedió 68,236 de los 107,330 sufragios que hicieron que Trump se llevara los 46 votos electorales de los tres estados y se hiciera con la presidencia.
Sin embargo, el mandatario parece haberlos olvidado cuando redactó su propuesta de presupuesto para 2018.
Esto porque en su presupuesto preliminar para el próximo año eliminó los fondos que han estado recibiendo tres agencias que impulsan el desarrollo en sus zonas rurales: Appalachian Regional Commission (ARC), Delta Regional Authority (DRA) y Northern Regional Commission.
La iniciativa ARC, por ejemplo, promeve el desarrollo desde el sur de Nueva York hasta el norte de Mississippi, donde viven unos 25 millones de personas. "Casi una cuarta parte de los 420 condados de los Apalaches sigue afrontando altas tasas de pobreza, un ingreso per cápita bajo y elevadas tasas de desempleo", se lee en un documento de la agencia.
En el condado Luzerne la tasa de pobreza es cercana al 16 por ciento. En Lackawanna se aproxima al 14 por ciento.
Por eso son vitales los 175 millones de dólares que aproximadamente ARC recibe anualmente en fondos federales para mejorar los alcantarillados, la infraestructura que provee agua, capacitar a pequeños empresarios...
Esos 175 millones de dólares palidecen frente al robusto presupuesto de 639,000 millones de dólares que contempló para el Departamento de Defensa, 52,000 millones de dólares más que en 2017, uno de los únicos tres departamentos a los que asignó más dinero en 2018.
A modo de comparación, con el aumento de 52,000 millones de dólares para defensa se podría financiar a Appalachian Regional Comission por unos 300 años. Y con el de 2,800 millones de dólares que fue propuesto para el Departamento de Seguridad Nacional se podrían costear sus iniciativas por 16 años.
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Un mensaje para Trump desde el EEUU rural
Delta Regional Authority –que impulsa iniciativas en la región del delta de Alabama, Arkansas, Illinois, Kentucky, Louisiana, Mississippi, Missouri y Tennessee– también se quedará sin fondos federales si el Congreso da luz verde a la propuesta del presidente de quitárselos.
DRA asegura que ha invertido 163 millones de dólares en un millar de proyectos que han ayudado a crear y mantener más de 26,000 empleos y llevar agua y alcantarillados a más de 64,000 residentes.
"DRA está en terreno todos los días trabajando para mejorar las comunidades rurales", dijo su presidente, Chris Masingill, en un comunicado publicado después de que el gobierno reveló su propuesta de presupuesto. "No puedes abogar por infraestructura y desarrollo y seguridad económicos en el Estados Unidos rural sin respaldar mecanismos como DRA", agregó Masingill en un velado mensaje al presidente.
En Appalachian Regional Commission divulgaron un comunicado escueto pero en el que tomaron nota sobre el propueso retiro de los fondos que reciben.
El presupuesto de Trump parece contradecir una de sus promesas electorales: "Los hombres y mujeres de nuestro país que han sido olvidados jamás volverán a ser olvidados". Su propuesta también va en contra de otro objetivo suyo, pues aunque se ha sentado a dialogar con grandes empresas automotrices para fomentar la producción local deja de lado a los pequeños empresarios que contribuyen con la economía de zonas rurales que dependen precisamente de esos emprendimientos.
La Administración de Pequeños Negocios (Small Business Administration) verá, si el presupuesto es aprobado como fue presentado, una caída del 5 por ciento en sus fondos para el 2018.
Sin embargo para el gobierno, quienes votaron por Trump "están obteniendo exactamente aquello por lo que votaron", como dijo el director de presupuesto del presidente, Mick Mulvaney, en la víspera.
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