null: nullpx
Logo image
El Vaticano

Abren la capilla ardiente de Benedicto XVI en la basílica de San Pedro

Los fieles podrán velar hasta el miércoles el cuerpo de Joseph Ratzinger. El acceso es libre y sin necesidad de reservar turno, indicó el Vaticano. El papa Francisco presidirá sus exequias el jueves en la plaza de San Pedro. El fallecido pontífice será enterrado en las grutas vaticanas.
Publicado 2 Ene 2023 – 03:32 AM EST | Actualizado 2 Ene 2023 – 07:22 AM EST
Comparte
Cargando Video...

La capilla ardiente del papa emérito Benedicto XVI fue abierta al público este lunes por la mañana en la basílica de San Pedro en el Vaticano, para que los fieles puedan despedirse del pontífice fallecido el sábado pasado a los 95 años.

Los restos del fallecido pontífice fueron trasladados en la madrugada a la basílica, donde permanecerán hasta el jueves, cuando el papa Francisco presidirá sus exequias en la plaza de San Pedro.

Las puertas de la basílica permanecerán abiertas al público hasta 7:00 p. m. este lunes. El martes y el miércoles se podrá acceder desde las seis de la mañana hasta las seis de la tarde.


Los fieles podrán velar hasta el miércoles el cuerpo de Joseph Ratzinger, el brillante teólogo y ferviente guardián del dogma, conocido por sus posiciones conservadores, quien renunció a su cargo en 2013 tras ocho años de pontificado, aduciendo el declive de sus fuerzas.

El acceso será libre y sin necesidad de reservar turno, indicó el Vaticano.

El papa Francisco le rindió varios homenajes públicos al "amado" Benedicto XVI, "fiel servidor del Evangelio y de la Iglesia", recordando su "bondad", "su nobleza", "su testimonio de fe y de oración, especialmente en estos últimos años de vida retirada".

Así serán los funerales de un papa sin funciones

Los restos quien fue el jefe de la Iglesia católica entre 2005 y 2013 se encontraban en la pequeña capilla privada del Monasterio Mater Ecclesiae donde residió desde su renuncia, en el corazón de los jardines del Vaticano.

La Oficina de Prensa de la Santa Sede divulgó el domingo dos fotografías de los restos mortales del primer pontífice alemán de la era moderna y quien se convertiría en el primero en dimitir del cargo en seis siglos.

En las imágenes divulgadas se puede ver al difunto yacente sobre un catafalco, vestido de blanco con una casulla roja, el color del luto papal, con una mitra blanca adornada con un borde dorado y un rosario entrelazado en sus manos.

El catafalco se encontraba en el centro de una pequeña capilla privada del monasterio, un lugar particularmente sobrio, con un crucifijo, un árbol de Navidad y un pesebre, que contrasta con los imponentes espacios y altares barrocos de la basílica de San Pedro donde será velado.

El funeral de un papa emérito, ya sin funciones, no cuenta con un protocolo específico, por lo que se seguirían algunos de los pasos para un pontífice en ejercicio.

Se trata de la primera vez en la historia moderna que un papa preside el funeral de su predecesor.

La ceremonia comenzará a las 08:30 del jueves, será inédita además de solemne, tal como anunciado por el Vaticano.

Las autoridades de Roma esperan que unas 60,000 personas acudan a los funerales de Benedicto XVI y que un promedio de 30,000 asistan cada uno de los tres días de funerales.

Bruno Frattasi, funcionario de seguridad de Roma, detalló a The New York Times que se cerrará el espacio aéreo sobre la plaza de San Pedro durante el tiempo que dure el funeral de Benedicto XVI. Un aproximado de 1,000 agentes de policía resguardarán la ceremonia.

Por su parte, la Oficina de Prensa de El Vaticano señaló que el funeral será “modesto”, de acuerdo con los deseos expresados por Benedicto XVI. A los ritos funerarios asistirán delegaciones de Alemania, el país natal del fallecido pontífice, e Italia.

Con ese acto se concluye la saga de los "dos papas", los dos vestidos de blanco, que han convivido durante casi una década en el Estado más pequeño del mundo.

Al término del funeral el féretro del pontífice emérito será enterrado en las grutas vaticanas, donde se encuentran las tumbas de los papas, precisó el Vaticano en un comunicado.

De Bonifacio VIII a Benedicto XVI

Después de ocho años de un pontificado marcado por múltiples crisis y de haber pasado los últimos 10 años de su vida rezando y estudiando, Benedicto XVI fue acusado a principios del 2022 de haber encubierto a cuatro curas pedófilos cuando era arzobispo en Alemania.

El que fuera considerado el pionero de la lucha contra la pederastia dentro de la Iglesia tuvo que romper su silencio para "pedir perdón" por su errores y negar haber encubierto a abusadores de niños, una mancha que empaña su papado.

Nacido en 1927, Joseph Ratzinger, fue profesor de teología durante 25 años en Alemania antes de ser nombrado arzobispo de Múnich.

El guardián estricto del dogma durante un cuarto de siglo como prefecto de la poderosa congregación para la Doctrina de la Fe, es recordado en América Latina por haber encabezado con vigor la lucha contra la Teología de la Liberación y por haber lanzado, ya como pontífice, una ofensiva mundial contra el aborto, la eutanasia y la legalización de las uniones homosexuales.

La sorpresiva renuncia de Benedicto XVI, en febrero de 2013, fue la primera en ocurrir en seis siglos. Dos máximos pontífices de la Iglesia católica habían tomado la misma decisión, ambos en tiempos medievales y con distintos destinos al previsto para el Papa emérito.

El papa Celestino V, quien renunció en 1294, dijo que prefería vivir como monje, pero su sucesor, Bonifacio VIII, decidió encarcelarlo y le impidió tener un funeral papal cuando falleció en 1296.

En el caso de Gregorio XII, quien dejó la silla papal en 1415 –el último en renunciar antes de Benedicto XVI–, decidió volver al colegio cardenalicio y tuvo los ritos funerarios que corresponden a un cardenal cuando murió, en 1417.

Loading
Cargando galería
Comparte

Más contenido de tu interés