Nikki Haley, la embajadora estadounidense en las Naciones Unidas, declaró este viernes en la sede de la organización que "estamos (EEUU) preparados para hacer más" en Siria, después de que Donald Trump decidiera lanzar un ataque aéreo contra el régimen de Bashar al-Asad.
Embajadora de EEUU en la ONU: "Estamos preparados para hacer más" en Siria
Nikki Haley, durante una intervención en el Consejo de Seguridad, defendió la actuación unilateral de Washington y no descartó más acciones tras el bombardeo del jueves, aunque deseó que "no sea necesario".


Haley, quien habló en una reunión del Consejo de Seguridad, apuntó, sin embargo, que "esperamos que no sea necesario".
En todo caso, la exgobernadora de Carolina del Sur aprovechó su discurso para señalar a Rusia e Irán, a los que pidió "asumir" su responsabilidad en el ataque químico del martes que dejó aproximadamente 80 muertos. "Cada vez que Al Asad ha pasado la raya de la decencia humana, Rusia le ha respaldado", añadió.
De hecho, acusó a Moscú de ser el valedor en la escena internacional del presidente sirio al sostener que "Al-Asad hizo esto porque pensó que no tendría ninguna consecuencia. Pensó que nadie lo castigaría porque sabía que Rusia lo apoyaría. Eso cambió anoche".
Haley utilizó la ocasión para defender y explicar este primer ataque de Estados Unidos a Siria afirmando que la utilización de armas químicas supone un tema de "interés vital de seguridad nacional".
"Nuestro Ejército destruyó la base aérea desde la que se llevó a cabo el ataque químico de esta semana. Estábamos totalmente justificados para hacerlo", resaltó. También defendió el operativo estadounidense, que se hizo fuera del amparo de las Naciones Unidas, sosteniendo que "hay momentos en los que los estados están llamados a actuar".
"Era el momento de decir basta. Pero no sólo decirlo. Era hora de actuar", enfatizó la embajadora, para quien "la mancha moral del régimen de (Bashar) al-Asad ya no podía seguir sin respuesta".
Durante su intervención, Haley hizo un llamado para que Moscú "actúe responsablemente" en el conflicto sirio, que lleva ya más de seis años desangrando siria. "El mundo está esperando a que Rusia reconsidere su alianza equivocada con Bashar al-Asad", subrayó Haley confiando que estos nuevos acontecimientos lleven el conflicto a "una nueva fase".
Antes de terminar su alocución, Haley reiteró que "Estados Unidos dio un paso muy medido anoche". Y, tras avisar de que Washington no descarta más acciones si son necesarias, realizó un llamamiento a "todas las naciones civilizadas para detener los horrores que están sucediendo en Siria y que necesitan una solución política".
Tras el ataque estadounidense con cerca de 60 misiles a una base aérea en Siria, Rusia e Irán salieron a criticar duramente la decisión de Washington. Sin embargo la mayoría de la comunidad internacional mostró su apoyo al operativo, que causó nueve muertos, entre ellos cuatro niños, y numerosos daños materiales, según Ansa, la agencia oficial siria.
Moscú mostró su total disconformidad con el ataque y acusó a Estados Unidos de utilizar un "pretexto inventado" por lo que advirtió que "causa un perjuicio considerable" a las relaciones entre los dos países.
















