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Elecciones 2016

Trump vs. Clinton: lo crucial del primer debate presidencial

Muchos aclaman el primero de los tres debates presidenciales como el momento más importante desde las convenciones de los partidos. Pero, ¿pueden los debates marcar la diferencia con el actual electorado altamente polarizado?
24 Sep 2016 – 10:17 AM EDT
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Lo que pase en los debates presidenciales puede marcar la diferencia entre Clinton y Trump Crédito: Getty Images/ Composición: David Maris

En las famosas películas de la Pantera Rosa, el despistado inspector Clouseau le dice a su criado chino Cato Fong que siempre "espere lo inesperado".

Ése podría ser un buen consejo para Hillary Clinton mientras la candidata demócrata se prepara para el primero de los tres debates presidenciales contra su impredecible rival republicano, Donald Trump.

Se pronostica que una cifra récord de 100 millones de televidentes sintonizará el lunes por la noche para ver a los candidatos debatir en la Universidad de Hofstra en Long Island, Nueva York, y las apuestas nunca han estado tan altas.

La pregunta en la mente de todos es si los debates marcarán una diferencia en la campaña, y si es así, ¿quién tiene más posibilidades de beneficiarse? "Vas a un Denny's o un salón de belleza y la gente está hablando de eso", dijo el veterano encuestador John Zogby.

A los analistas les gusta decir que los debates presidenciales no cuentan tanto como la gente piensa, especialmente este año, con un electorado especialmente polarizado. "No hay tantos votantes indecisos por ahí", dijo Geoffrey Skelley, del Centro para Políticas de la Universidad de Virginia.

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Clinton vs. Trump: los rounds previos a la batalla final

Pero lo cerrado de la contienda hace que los debates sean potencialmente más decisivos, especialmente dada la enorme diferencia de estilo entre el impetuoso y franco Trump y Clinton, quien utiliza un lenguaje más elevado.

"Estos debates son muy importantes, porque tenemos a dos candidatos empatados", dijo Zogby. Como ambos candidatos están empatados con cifras cercanas a los 45 puntos "ninguno de los dos tiene aún una estrategia ganadora para superar al otro", agregó.

Los candidatos intentarán apelar tanto a sus partidarios como a los independientes. Aunque los votantes independientes ahora representan una mayor proporción del electorado, los investigadores cuestionan realmente cuán neutros son. Un estudio de Pew descubrió que del 92 al 94% son miembros de alguno de los partidos o bien se inclinan por alguno de ellos.

Los verdaderos independientes están tan desconectados del proceso político que "incluso podrían no ver el debate", agregó Skelley.

El formato de dos personas, que permite más tiempo para dar respuestas razonadas y diseñar la política parecería favorecer a Clinton, quien tiene mayor experiencia en la política y comprende mejor los temas.

Clinton también tiene un buen historial en los debates y ha participado en debates frente a frente con anterioridad. "Pero, ella nunca ha debatido con alguien como Trump", dijo Skelley.

Los reproches espontáneos de Trump tomaron por sorpresa a sus rivales en las elecciones primarias. Esta vez es diferente. "Ahora ya se sabe de lo que es capaz", dijo Steven Schale, un ex miembro del personal de la campaña de Obama 2012, quien no participa en estas elecciones.

Los ayudantes de Clinton dicen que se está preparando para dos escenarios en sus preparativos de esta semana: "Uno es en el que Trump es mesurado y serio, y otro en el que es impredecible y hace ataques personales provocativos", según Reuters.

"Éste es el tipo de situaciones en que ella (Clinton) es muy buena," dijo Schale, recordando su impresionante actuación en 2015 durante un extenso interrogatorio de 11 horas por parte del comité del Congreso de mayoría republicana que investiga el asalto fatal al consulado de Estados Unidos en Bengasi, Libia.

"Hillary tiene todas las ventajas", coincide Fernand Amandi, encuestador de Bendixen & Amandi International, quien realiza las encuestas para Univisión. "Trump carece de los fundamentos básicos para los debates políticos", añadió.

Los desafíos que enfrenta cada candidato

Para Clinton, el debate es una oportunidad para reanimar su debilitada campaña. La clave de los debates es asegurarse de que sus votantes se sientan estimulados por su desempeño, según los expertos. Después de su reciente caída en las encuestas, el desafío para Clinton es restaurar su potencial con los votantes de tendencia demócrata. "Ella tiene que hacer que sus votantes salgan a votar y cerrar la brecha de entusiasmo", dijo Skelley.

"¿Qué puede hacer Clinton para parecer agradable, creíble o la onda del futuro?", dijo Zogby. "Ella tiene un déficit real con los votantes más jóvenes", especialmente cuando se compara con el presidente Barack Obama o con su ex rival en las elecciones primarias, el senador de Vermont, Bernie Sanders, añadió. "Ella puede ser agradable. La he visto hacer panqueques y trabajar de una pequeña habitación", recordó.

Trump no tiene que cumplir tantas expectativas, según coincide la mayoría de los analistas.

"Todo lo que tiene que hacer es no hacer daño, y terminar de pie al final de la noche", dijo Zogby. "Pero, sería útil si pudiera mostrar algo de sustancia", agregó.

"Trump tiene un desafío que vencer. Cuando termine el debate tiene que haber convencido a suficientes estadounidenses que es apto para el trabajo", dijo Schale. "Mucha gente no cree que lo sea. Él tiene que pasar la prueba básica de '¿Puede ser presidente?'", agregó.

Obedecer las reglas

"Será interesante ver en qué medida ambos obedecen las reglas", dijo Schale, señalando que Trump interrumpía mucho durante los debates de las elecciones primarias, a menudo denigrando a sus rivales.

Trump ya se ha quejado de los moderadores, entre los que se incluye a Anderson Cooper de CNN. El debate del lunes será presentado por Lester Holt, el sensato presentador de NBC Nightly News.

Trump le dijo a Fox News esta semana: "Mira, es un sistema falso. Lester es un demócrata. O sea, todos ellos son demócratas. ¿OK? Es un sistema muy injusto". De hecho, los registros públicos muestran que Holt ha sido un republicano registrado en el estado de Nueva York desde 2003.

Si nos guiamos por los debates anteriores, Trump podría no resistir el peligroso impulso de atacar a la mujer que ha denominado "Crooked Hillary" (Hillary La Deshonesta).

"Los debates de las elecciones primarias muestran que es fácil atraer a Trump a una pelea estúpida", dijo Schale.

Aun así, los rivales de Trump han aprendido en los últimos 18 meses que es peligroso subestimarlo. Hasta ahora, el magnate de los bienes raíces y presentador de ‘reality show’ ha superado cada desafío que se le ha presentado en la campaña, aunque de formas poco ortodoxas.

"Por sus venas le corre antídoto", dice Amandi. "Ha sido capaz de convertir lo que serían errores que acabarían con la carrera política de cualquiera en una rutina diaria que sólo parece reforzar su campaña en lugar de destruirla", añadió.

Momentos del debate

Los analistas dicen que los espectadores no deben prestar demasiada atención a la sustancia. "Los debates no se tratan del debate, se tratan de los momentos que capturan la esencia", dijo Schale.

Hay numerosos ejemplos de momentos de debates previos:

  • 1976: "No existe un dominio soviético de Europa Oriental", dijo Gerald Ford a un público desconcertado, lo cual hizo parecer que su rival Jimmy Carter comprendía mejor la política exterior.
  • 1992: George H. Bush miraba su reloj, lo cual lo hacía parecer aburrido y distante de los espectadores, un agudo contraste con la empatía de su rival, Bill Clinton.
  • 2000: Los repetidos suspiros fuertes de Al Gore lo hicieron parecer grosero y condescendiente con George W. Bush.
  • 2012: Mitt Romney defendió el recorte de un subsidio a la radiodifusión pública que eliminaría a Plaza Sésamo y Big Bird (Abelardo Montoya). La campaña de Obama publicó un anuncio poco después: "El mayor enemigo de Mitt Romney es Abelardo Montoya".
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