Así atrapó el FBI a uno de los más buscados: una fuga de agua inició la cacería del fugitivo

Después de su primera escapada en 2008, Yaser Abdel Said volvió a fugarse en 2017 con ayuda de su hijo y su hermano. En 2020, sin saberlo, serían sus familiares los que conducirían a las autoridades al lugar en el que se escondía.

Video Tras 12 años como prófugo, capturan a un hombre acusado de matar a tiros a sus dos hijas en Irving

Un fallido servicio de plomería fue el hilo que permitió al FBI comenzar a desenredar la madeja para dar con el lugar donde se escondía Yaser Abdel Said, uno de los 10 fugitivos más buscados por el FBI, que fue capturado esta semana en Texas. Said está acusado de haber asesinado a sus dos hijas.

El 14 de agosto de 2017,un trabajador de mantenimiento en el complejo de departamentos Copper Canyon, en Bedford, Texas, fue requerido para reparar una fuga de agua, pero inicialmente nadie abrió la puerta.

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“Tocó y tocó la puerta para hacer la reparación, pero tenía puesto el cerrojo por dentro; eso indicaba que había alguien adentro”, dijo a Univision Noticias, Melinda Urbina, portavoz de la oficina del FBI en Dallas, Texas. “Pero, aun cuando el trabajador de mantenimiento tenía llave para abrir la puerta, no podía entrar”.

El fontanero insistió. Notificó al inquilino a lo que iba y éste le permitió pasar para hacer las reparaciones. Ese fue su error.

Yaser Abdel Said, un ex taxista de Irving Texas de origen egipcio era uno de los 10 fugitivos más buscados por el FBI. Fue capturado esta semana sin oponer resistencia. Se le acusa de haber asesinado a tiros a sus dos hijas adolescentes.
Yaser Abdel Said, un ex taxista de Irving Texas de origen egipcio era uno de los 10 fugitivos más buscados por el FBI. Fue capturado esta semana sin oponer resistencia. Se le acusa de haber asesinado a tiros a sus dos hijas adolescentes.
Imagen Departamento de Policía de Irving, Texas.

“La actitud de aquel hombre hizo sospechar al trabajador y él le notificó a su supervisor, y lo describió como un hombre del Medio Oriente, de mediana edad”, dijo Urbina. “El supervisor sabía que en ese departamento vivía Islam y que él era hijo del señor que se había fugado hacia nueve años; lo que sucedió fue tan solo una casualidad”.

El trabajador le confirmó a su jefe que la foto del cartel de búsqueda del FBI coincidía con el rostro de Yaser Abdel Said, el hombre que vio en el departamento. De inmediato notificaron al FBI.

Le pisan los talones, se escapa por la ventana y pierde sus lentes

A pesar de que un agente de la Fuerza de Tarea de Crímenes Violentos del FBI en Dallas pidió permiso a Islam para revisar el inmueble, el hijo del fugitivo se negó a cooperar. Así, Yaser Abdel Said tuvo tiempo de escaparse de nuevo.


Aquella noche del 14 de agosto, Islam hizo una llamada y dijo: “Tenemos un problema”.

Los registros de AT&T indican que Islam estuvo en contacto con sus tíos.

A la 1:00 de la mañana del día siguiente, el equipo de Tácticas Especiales (SWAT) del FBI en Dallas ejecutó una orden de registro en el apartamento de Islam.

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Al encontrar la puerta principal cerrada, se vieron obligados a abrirla. No encontraron a nadie adentro, pero observaron que la puerta corrediza de vidrio del patio estaba abierta. En el patio notaron un arbusto con ramas rotas.

“Eso sugirió que alguien había saltado del patio y cayó en un arbusto”, dijo Melina Urbina. “Junto al arbusto encontraron un par de anteojos”. Los espejuelos fueron recolectados como evidencia. Al final se conoció que pertenecían al fugitivo. Yaser Abel volvió a evitar la captura.

Las colillas de cigarros, un cepillo dental y el registro de llamadas del hijo

Los agentes también recolectaron varias colillas de cigarrillos y un cepillo de dientes dentro de una maleta de equipaje, en el armario.

El laboratorio del FBI en Quántico, Virginia cruzó el ADN encontrado en estos elementos con el ADN recolectado de Amina y Sarah, las hijas del fugitivo y que presuntamente fueron asesinadas por él. Los analistas determinaron un 1 entre 5.3 quintillones que probablemente el ADN encontrado en las colillas de cigarrillos, los anteojos y el cepillo de dientes provenía del padre biológico de Amina y Sarah: Yaser Abdel Said.

Después de la redada, el 26 de agosto de 2017, autoridades del servicio de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EEUU ubicaron a Islam a más de 1,000 millas de distancia, dentro de un automóvil que fue seleccionado para una inspección secundaria en la frontera entre EEUU y Canadá.

Islam Yaser-Abdel Said, de 32 años e hijo de Yaser Abdel Said enfrenta cargos federales por presuntamente haber colaborado por más de una década para esconder a su padre, quien estaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados por el FBI.
Islam Yaser-Abdel Said, de 32 años e hijo de Yaser Abdel Said enfrenta cargos federales por presuntamente haber colaborado por más de una década para esconder a su padre, quien estaba en la lista de los 10 fugitivos más buscados por el FBI.
Imagen Departamento de Policía de Irving, Texas.


El conductor del automóvil, Hany Medhat dijo a los agentes de CBP que él e Islam habían decidido hacer un “viaje de locos por carretera”.

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Sin embargo, una búsqueda en su teléfono reveló que le había dicho a su empleador que tenía una “emergencia familiar”.

El último escondite fue la casa de una sobrina

Tres años después, el 17 de agosto de 2020, agentes del FBI comenzaron a vigilar las 24 horas una casa en
Justin, Texas, comprada a nombre de Dalal Said, la hija de Yassein.


“Aunque ella aparecía como la dueña de la casa, eso no quiere decir que ella sabía que su papá la había registrado a su nombre”, dijo la portavoz del FBI. “Por eso no fue arrestada”.

No obstante, los investigadores vieron a Islam y Yassein supuestamente conducir hasta la casa.

“Lo visitaban varias veces a la semana; le traían comida y cosas”, dijo Melinda Urbina. “Cuando salían se llevaban con ellos las bolsas de basura; no querían que encontráramos el ADN del fugitivo”.

Dos días después, a las 11:51 p.m. del 19 de agosto, después de que Yassein e Islam abandonaron la residencia, los agentes observaron en dos ocasiones lo que parecía ser la sombra de una persona que cruzaba el interior de la residencia frente a la ventana.

El 25 de agosto, los agentes vieron una vez más a Islam y Yassein salir de la casa con dos bolsas de basura. Los siguieron hasta un centro comercial en Southlake, Texas, aproximadamente a 30 kilómetros de la casa.

Los agentes vieron cómo Islam salía del vehículo y Yassein tiró la basura. Una vez que el vehículo salió del estacionamiento, los agentes comenzaron a hurgar en los botes de basura.

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Dentro de los contenedores localizaron dos bolsas que coincidían con las que habían visto llevar a los hombres al automóvil. Recogieron las bolsas y se las llevaron a la oficina del FBI, donde encontraron numerosas colillas de cigarrillos similares a las que encontraron en 2017.

Yassein Said, de 59 años, hermano de Yaser Abdel Said, presunto asesino de sus dos hijas el 1 de enero de 2008, también fue arrestado por el FBI. Se le acusa de un cargo federal de esconder a un fugitivo de la ley.
Yassein Said, de 59 años, hermano de Yaser Abdel Said, presunto asesino de sus dos hijas el 1 de enero de 2008, también fue arrestado por el FBI. Se le acusa de un cargo federal de esconder a un fugitivo de la ley.
Imagen Departamento de Policía de Irving, Texas.

Uno enfrenta la pena de muerte. Los otros 5 años de prisión federal

Al día siguiente, los agentes ejecutaron una orden de registro en la casa, donde capturaron sin ningún contratiempo a Yaser Abdel Said.

Entre tanto, Yassein e Islam fueron atrapados por separado en Euless, Texas.


“Yaser Abdel Said ha sido transferido a una cárcel del condado de Dallas, donde enfrentará cargos estatales”, dijo Melina Urbina. “Su hijo y su hermano enfrentan cargos federales”.

Islam Said de 32 años y su tío Yassein Said, de 59 años han sido acusados penalmente de ayudar a Yaser Abdel Said a evadir la captura durante más de 12 años, anunció la fiscal federal para el distrito norte de Texas, Erin Nealy Cox. Ambos hicieron sus apariciones iniciales ante el juez federal Hal R. Ray en Fort Worth, el viernes por la tarde.

Si son declarados culpables, Yassein e Islam enfrentan hasta cinco años en una prisión federal. Por su parte, Yaser Abdel Said, de 63 años, es acusado por el estado de Texas de homicidio capital, y enfrenta la pena de muerte.

“Hemos finalizado la captura”, dijo a Univision Noticias Robert Reeves, portavoz del Departamento de Policía de Irving, Texas, donde ocurrió el doble asesinato de las hermanas. “Ahora se comenzará a hacer justicia para Amina y Sarah y nos preparamos para la siguiente fase…el juicio”.