Cómo esta ciudad norteamericana dejó de depender del automóvil

Vancouver, en Canadá, se puso la meta de que un 50% de su transporte no requiera el uso de coches. Lo consiguió cinco años antes de lo previsto.

Vancouver se ha transformado en una de las ciudades más amables con los ciclistas de todo el planeta.
Vancouver se ha transformado en una de las ciudades más amables con los ciclistas de todo el planeta.
Imagen FRANCK FIFE/AFP/Getty Images

Cuando se trata de dar un empujoncito a los choferes para que dejen de usar sus autos, Vancouver clasifica como la urbe con las mejores credenciales en Norteamérica. En la ciudad canadiense, un 10% de los viajes diarios al trabajo se realizan en bicicleta, sobrepasando, en mucho, indicadores de ciudades de Estados Unidos y Canadá con un tamaño semejante. Pero la grata noticia es que, a partir de 2015, la mitad de todos los viajes dentro de los confines de la ciudad se dan a pie, en bicicleta o en transporte público.

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La ciudad esperaba alcanzar esta meta en 2020, pero la logró cinco años antes de lo pronosticado y muchísimo antes que sus homólogas en el continente.

El éxito del “transporte público activo” en esta ciudad del oeste canadiense es el tema central de un nuevo mini documental realizado por STREETFILMS. Por medio de entrevistas a funcionarios con un papel clave en el envidiable logro de Vancouver, y, a su vez, a defensores del transporte sostenible que se daban cita en una conferencia estival de planificación urbana, la realizadora Clarence Eckerson rastrea la impresionante trayectoria de la urbe y muestra cómo ésta se las arregló para superar los obstáculos que, durante las últimas décadas, bloquearon el desarrollo de iniciativas similares en muchas otras ciudades.

Todo comenzó en los años sesenta, sostiene el ex-urbanista principal de la ciudad (y toda una celebridad en Twitter en la materia), Brent Toderian, cuando los residentes rechazaron la propuesta de una autopista que habría desfigurado el denso núcleo urbano, separándolo de su famoso litoral.

Vancouver, por cierto, es la única gran ciudad en Norteamérica que no es recorrida por una autopista. Luego tuvo lugar, en su abierto paseo marítimo, la muy exitosa Exposición Universal de 1986, cuyo eje temático fue el futuro del transporte y sentó las bases para el debut del elevado SkyTrain, un sistema de tren ligero automatizado que, a ratos, baja en picada. Una nueva extensión que abrió en diciembre permitió al SkyTrain asegurar su condición de ser el sistema de metro totalmente automático más largo del mundo (superando al Metro de Dubai que, igualmente, no tiene necesidad de chofer). Dicho sistema, a su vez, ayudó a pavimentar el camino para la dramática transformación del litoral de Vancouver un par de años después. Cientos de oficinas y residencias fueron construidas, de la mano de nuevas vías para peatones y del malecón de la ciudad –el cual es “a menudo clasificado como el mejor espacio público en, al menos, Canadá”, añade Toderian.

Los Juegos Olímpicos de Invierno de 2010, por su parte, fomentaron las conversaciones callejeras entre autos y transeúntes, y lo que reinó en los años intermedios fue un montón de inteligentes decisiones, tales como convertir un tramo de Granville Street en un centro comercial para peatones en los setentas, y el giro estratégico de la ciudad en 2008 para estimular la práctica de la bicicleta, no solo como pura recreación, sino como una vía diaria de movilidad. Todo un laberinto de nuevos y seguros carriles para bicicletas que han dado un espaldarazo innegable a la infraestructura del transporte público de Vancouver, más allá del corazón mismo del centro de la ciudad: “ un 24% de nuestra red para bicicletas está considerada como apta para todas las edades y capacidades”, indica Dale Bracewell, director de planificación de transporte en la urbe. Y por si fuera poco, un plan de dos mil millones de dólares para expandir TransLink, red de transporte masivo en Vancouver, fue aprobado el mes pasado por el Ayuntamiento, persiguiendo crear más opciones de transporte público activo en zonas de la ciudad vírgenes aún de este tipo de iniciativas.

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“Como usuario…tengo opciones. Y lo mejor no es solo tener opciones disponibles, sino disponer de opciones agradables, cada día”, añade Toderian. “Construir todo este desarrollo ha tomado décadas –una vastedad de iniciativas de desarrollo urbano que ahora, simplemente, han confluido”.

Puedes ver el video de STREETFILMS en inglés a continuación:

Este artículo fue publicado originalmente en inglés en CityLab.com.