La historia de Amador y Emmanuel, el padre y el hijo que desaparecieron intentando cruzar a EEUU y fueron hallados dos años después en una fosa clandestina

Un grupo de 13 migrantes mexicanos que pretendían llegar a Estados Unidos, entre los que viajaba un padre y su hijo, fueron hallados sin vida en la misma zona donde desaparecieron en septiembre de 2021. Las autoridades confirmaron la identidad de las personas gracias a un análisis de ADN.

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Amador Aguilar Mendoza, de 55 años, y su hijo, Emmanuel Aguilar Bailón, de 24, dejaron su natal Delicias, en el norteño estado de Chihuahua, en septiembre de 2021 con la idea de ir a trabajar a Estados Unidos. No obstante, fueron secuestrados junto a otros 11 hombres por un grupo armado.

Dos años después, sus restos han sido hallados en una fosa clandestina.

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En septiembre de 2021, Amador y Emmanuel Aguilar tomaron camino al norte. Entre ellos, iban dos 'polleros' (traficantes de personas) que prometieron cruzarlos por la frontera entre Ojinaga, Chihuahua, y Presidio, Texas, con el fin de llegar hasta las ciudades de Dallas y Odessa.

La noche del 25 de septiembre, los hombres perdieron comunicación con sus familias al cruzar por una zona estéril del norte del estado mexicano cuando tomaron una ruta rumbo a una zona conocida como Lomas de Arena.

Emmanuel Aguilar Bailón, de 24 años, y su padre, Amador Aguilar Mendoza, de 55 años, en una imagen compartida por su familia a través de redes sociales.
Emmanuel Aguilar Bailón, de 24 años, y su padre, Amador Aguilar Mendoza, de 55 años, en una imagen compartida por su familia a través de redes sociales.
Imagen Facebook

Un grupo armado interceptó a los migrantes

Según declaró más tarde la única persona que pudo escapar, el grupo fue interceptado y privados de libertad por hombres armados entre el municipio de Coyame del Sotol y la comunidad de Lomas de Arena, en un ejido conocido como El Mimbre, ubicado a 70 millas en el suroeste de la frontera con EEUU.

Al conocer la noticia, las familias denunciaron la desaparición de las personas e inmediatamente autoridades de Chihuahua comenzaron rastreos terrestres y aéreos en las zonas de Coyame del Sotol y Lomas de Arena.

La Fiscalía y la Comisión Estatal de Seguridad encontró algunas evidencias en el lugar como casquillos de bala y vehículos incendiados. Los vehículos, además, tenían impactos de armas de fuego, pero ningún rastro de los desaparecidos.

En octubre, la búsqueda se intensificó; sin embargo, resultó infructuosa. Las familias, por su parte, realizaron campañas en distintas ciudades y en redes sociales.

En un sitio especial llamado "13 desaparecidos Coyame-Chihuahua" publicaron una petición a la opinión pública: “Trece familias te suplicamos de todo corazón que por favor nos ayudes a dar con ellos, no te conviertas en cómplice, no te quedes callado, denuncia”.

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Además, se dio a conocer las identidades de las personas que componían el grupo: Rodolfo Guzmán, Emanuel Aguilar Bailón, Elías Girón, Javier Ricardo López, Benigno Alberto Álvarez, José Luis Pallares, Amador Aguilar Mendoza, Luis Carlos Islas Villegas, Lorenzo Abraham González Mendoza, Alan Ricardo Salas Torres y Daniel Alonso Villa Rascón.

En el transcurso de la búsqueda, en la misma zona, las autoridades lograron rescatar el 15 de octubre de ese año a un grupo de 53 migrantes que se encontraban en las cercanías de Lomas de Arena, a nueve horas de distancia de Ciudad Juárez, en el punto conocido como Rancho Bonito.

Recompensa por los desaparecidos

Diez meses después, en julio de 2022, al no tener novedades sobre la búsqueda de los desaparecidos, las familias ofrecieron una recompensa de hasta dos millones de pesos mexicanos ($116,000), al tiempo que enviaron un mensaje desesperado a los jefes de plaza de los grupos criminales que operan en el corredor fronterizo desde Coyame a Ciudad Juárez.

“No nos los desaparezcas, tú sabes que no te debían nada, solo buscaban un mejor futuro para sus hijos, no nos hagan pagar a sus familias algo que no te debemos. Ya has hecho el suficiente daño (…) No buscamos culpable, lo único que buscamos es traer paz a nuestras familias”, aseguraron.

A pesar de las súplicas a los grupos criminales que controlan el estado y las manifestaciones públicas para exigir al gobierno la aparición de los desaparecidos, las familias no recibieron noticia alguna de sus familiares.

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El tiempo siguió su curso hasta que el pasado jueves 24 de agosto, la Fiscalía General del Estado de Chihuahua (FGE) informó que una fosa clandestina con “decenas de restos humanos” en su interior había sido localizada en la zona de El Mimbre, la misma donde había sido reportado como desaparecido el grupo.

Peritos y grupos de trabajo multidisciplinarios especializados en búsqueda forense rastrearon el terreno logrando exhumar un total de 11 osamentas humanas.

La FGE confirmó que cuatro de los 11 cadáveres habían sido enviados a la Dirección de Servicios Periciales, donde especialistas realizaron diversos estudios para determinar el tiempo y la causa de los decesos, así como el sexo e identidad de las víctimas.

Reconocen a sus familiares desaparecidos

A inicios de septiembre, Irma Aguilar Bailón reconoció la vestimenta y algunos artículos personales de su padre y su hermano, que se encontraban entre los restos humanos. Días después, pruebas genéticas confirmaron que se trataba de ellos.

“Mi hermano tenía la ilusión de ir porque tenía su pareja y una niña, tenía la ilusión de tener su casa propia y superarse, mi papá decidió acompañarlo porque no quería dejarlo ir solo. Los dos se despidieron, iban con muchas ganas de triunfar, con la esperanza de que iban a cruzar a EU”, contó Irma en entrevista con el periódico mexicano Milenio.

“No se encontraban calcinados, no nada, se encontraron los restos, la causa de muerte aparente ha sido a causa de violencia, es decir no fue muerte natural, fueron asesinados, estamos a la espera de que se nos dé más información”, agregó.

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Una línea de investigación apunta a que sicarios del cartel de Sinaloa confundieron a los migrantes con sicarios de La Línea y los asesinaron, o consideraron que estaban invadiendo su territorio.

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