Los bebés arcoíris son tan especiales, que su significado te hará llorar de ternura

Cada mujer vive su embarazo de una manera diferente. Aunque hay síntomas y reacciones comunes, las molestias que le dieron a una no necesariamente estarán presentes en la vida de otra.

Lo mismo sucede con los sentimientos y emociones que surgen en los 9 meses de espera: no todas las próximas mamás rebosarán de alegría o se preocuparán por los mismos asuntos.

Además, hay un terrible factor que nadie espera tener que enfrentar: la pérdida de un hijo causa una tristeza inigualable en la familia que lo esperaba con ansias.

Las razones por las que el bebé no llega al mundo pueden ser muchas, desde que la mamá sufra un rechazo inmunológico, hasta otros problemas médicos.

Por otro lado, también están los niños que nacen con complicaciones de salud y al poco tiempo fallecen.

Pero el hecho de que los papás hayan pasado muy poco tiempo con ese hijo no significa que no haya sido importante. Por el contrario, fue tan especial que se convirtió en un bebé estrella.

Una vez que la familia supera esa pérdida, tal vez se sienta dispuesta a intentar nuevamente tener un hijo. Es aquí cuando llegan los niños arcoíris.

¿Qué son los bebés arcoíris?

En el mundo de la maternidad y la crianza, así se le denomina a los niños que nacen en la familia, luego de un bebé haya fallecido en el embarazo o pocos días después de haber nacido.

En la naturaleza, solo podemos ver un bonito arcoíris después de la lluvia. En ese sentido, estos bebés simbolizan que los papás atravesaron por un momento difícil (una dura tormenta), pero después encontraron la luz y los colores volvieron a su vida.

La tempestad a la que se enfrentan las parejas no es solo la pérdida de un hijo, sino todas las dudas, miedos y preocupaciones que el nuevo embarazo conlleva (las cuales generalmente se ven aumentadas por la experiencia previa).

Es decir, después de haber vivido un suceso tan difícil, es normal que el nuevo embarazo se vea rodeado del temor de que se repitiera la historia.

Pero, ¡no te preocupes más! Tu hijo nació sano y finalmente puedes abrazarlo todo lo que quieras.

Vale la pena notar que el nuevo niño no viene a “sustituir” al que no logró nacer.
De hecho, la psicóloga perinatal Diana Sánchez señala que los padres deben reconocer que:

Por eso, la especialista asegura que no se le debe poner el mismo nombre al bebé arcoíris, que el que se tenía pensado para su hermanito.

Por el contrario, hay que reconocer la importancia de la vida pasada y agradecer la nueva.

¿Sabías el significado de los bebés arcoíris? ¿Conoces a un pequeño que lo sea, aunque no lo sepa?