Soy madre trabajadora y no puedo pasar todo el tiempo que quisiera disfrutando de mis dos hijos. Y hay veces en las que irremediablemente me siento culpable por ello, pero la realidad es que por desgracia no me puedo dividir y no me queda otra opción que conciliar mi vida laboral y familiar según mis posibilidades.
Sorpresitas en la lonchera que harán sonreír a tu hijo

Sin ir más lejos, el próximo 18 de enero será el cuarto cumpleaños de mi hijo Sergio y no podré pasar la tarde con él y la familia para celebrarlo juntos. Ese día estaré en el colegio dando clase a mis alumnos, atendiendo las tutorías con sus padres y asistiendo a reuniones de profesorado. Llegaré muy tarde a casa, así que adelantaremos la celebración al domingo.
Para el lunes le tendré preparadas algunas cositas como por ejemplo una sorpresa en su lonchera escolar que seguro le hará sonreír. Es una de las formas que se me ocurren para hacerle llegar todo mi amor en un día tan especial como es su cumpleaños.
Con ese gesto quiero que sepa que su mamá está con él aunque sea en la distancia, que lo amo con locura y que lo que más me importa es que sea feliz. Poco a poco tiene que comprender que quererse no implica estar necesariamente el uno al lado del otro y que el amor puro e incondicional no lo merma la distancia.
Seguramente tú por tu trabajo o por otras circunstancias te hayas encontrado en la situación de no poder pasar todo el tiempo que desearías con tu pequeño. Quizás te alivie saber que existen muchas formas de hacerle llegar tu amor a tu hijo con simples detalles que dibujarán una sonrisa permanente en su rostro.
Y aunque no trabajes y puedas pasar tiempo con tus hijos nunca está de más que los sorprendas y lo motives a diario.
A continuación te voy a proponer ideas de sorpresitas para que coloques en la lonchera escolar de tu hijo. ¡Seguro que se alegrará al verla y se acordará de ti! Coge papel y lápiz y toma nota:
Ejemplos de sorpresitas para niños que todavía no saben leer ni escribir:
- Coloca dentro de su lonchera una foto de familia de algún momento especial que hayáis vivido juntos (visita al zoo, algún viaje especial, etc.).
- Imprime dibujos de sus personajes de dibujos animados preferidos, animales, etc. para colorear. Pon uno diferente cada día en su lonchera.
- Cómprale un puzzle y cada día ponle en su lonchera una pieza diferente. Cuando llegue a casa ir armando las piezas hasta completar el puzzle.
- Otra sorpresa puede consistir en que le prepares un súper desayuno con una presentación original y divertida que hará sus delicias al paladar y a la vista. Aquí tienes ejemplos de presentaciones creativas.
- Otra idea puede consistir en ponerle en su lonchera algún caprichito como un chocolate o una chuche.
Ejemplos de sorpresas para niños que saben leer y escribir:
- Imprime dibujos de unir los números. ¡Ya verás cómo le gusta descubrir el dibujo que está escondido!
- Diseña vales en pequeñas tarjetas de cartulina e introduce una diferente cada día. Algunas ideas pueden ser: “Vale por un masajito en los pies”, “Vale por un partido de fútbol”, “Vale por un ratito jugando a los peluqueros”, “Vale por una entrada de cine para ver tu película preferida”, etc.
- ¡Los chistes harán reír a tu hijo! Sorpréndelo un día con alguno.
- Los niños son súper curiosos, así que te propongo que elabores tarjetitas de cartulina con alguna curiosidad para que la coloques en su lonchera. En Internet hay multitud de páginas webs donde podrás encontrar información sobre la fauna, la flora, experimentos, etc. que pueden sorprender a tu hijo. Algunos ejemplos pueden ser: “¿Sabías que la lengua de un camaleón puede ser tan larga como su cuerpo?”, “Las pulgas pueden saltar distancias que equivalen a cien veces la longitud de su cuerpo”, etc.
- También puedes sorprender a tu hijo con notitas en las que escribas alguna pista sobre el plan que tienes previsto para hacer el fin de semana. Por ejemplo, ir a esquiar: “Vamos a ir a un lugar en el que tendrás que llevar ropa de deporte muy abrigada”…
- Siempre acertarás con notas en las que escribas frases motivadoras que refuercen su autoestima positivamente: “Estoy muy orgullosa de ti, hijo mío”, “Qué suerte tienen todos tus compañeros de tenerte como amigo”, etc.
- Sorpréndelo también con alguna adivinanza que además de hacerlo sonreír le hará pensar.
Como ves, las ideas con las que puedes hacer sorprender y hacer sonreír a tu hijo son ilimitadas. Te animo a que lleves a la práctica alguna y que pienses en otras. ¿Qué se te ocurre? Compártelo con nosotros.









