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Unidas contra la violencia obstétrica: Maltratos que no deberías tolerar durante el embarazo

Unidas para defender nuestros derechos y cuidar de nosotras.

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Son muchas las mujeres embarazadas que sufren malos tratos por parte de parteras, obstetras y médicos en general que les impiden tomar decisiones. Y también son muchas las mujeres que reciben insultos y se las somete a exigencias, amenazas, imposibilidad de escoger lo que desean, humillaciones verbales y físicas. Yo soy una de ellas. 

Enterarnos de nuevos casos de violencia obstétrica es muy triste, pero podemos hacer algo para evitar que otras mujeres sufran lo mismo: denunciar. Con el paso del tiempo son más los países que aprueban leyes para salvaguardar la salud de la mujer y la de los bebés, y podemos respaldarnos en esa legislación para denunciar y hacer que esta situación acabe de una vez. 

Para saber qué denunciar primero tenemos que informarnos, presta mucha atención a lo que sigue.

Lo que no debes permitir

Imagen thinkstock

Hay una falsa creencia de que violencia o malos tratos solo se refiere a lo físico; sin embargo, comprenden e incluye mucho más que eso. La violencia obstétrica es también toda agresión que afecte el nivel psicológico y emocional de una mujer, que muchas veces se une a los daños físicos.

Estas actitudes o situaciones comprenden violencia obstétrica:

  • Pérdida de autonomía para tomar decisiones sobre el propio cuerpo
  • Coacción (amenazas)
  • Degradación verbal
  • Violencia sexual
  • El que no soliciten tu autorización o consentimiento para llevar a cabo  intervenciones
  • Prohibición de escoger alternativas relativas al embarazo y el parto
  • Daño que incluyan el aspecto físico, sexual, psicológico, emocional, laboral, económico, patrimonial o sufrimiento de algún tipo
  • Privación de la libertad
  • Tratamiento deshumanizado por parte del personal sanitario
  • Abuso de medicación
  • Inducir a través del miedo a pasar por procesos innecesarios cuando podrían ser naturales
  • Que no pidan tu autorización para realizar procedimientos, algunos ejemplo son examen vaginal, ruptura de membranas, suministro de medicamentos, etc.
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>>  ¡Atenta! Estas 10 prácticas se consideran como violencia obstétrica

Imagen Thinkstock

¡Son tus derechos! 

También es común la humillación verbal, por ejemplo que el médico te diga que no tienes conocimiento para decidir, que es mejor que te calles, cuando puedan incitarte a una operación forzada.

Jamás lo olvides: TÚ tienes la última palabra. Sé que cuando se tiene contracciones, se siente dolor y encima nos advierten de que algo no va bien, es complicado hacer valer nuestros derechos, pero recuerda que los tienes. Y si en ese instante por lo que sea no puedes reclamarlos pero debiste hacerlo, no te detengas allí, aunque lo hagas más tarde actúa.

¿Has pasado por una situación de violencia obstétrica? Comparte tu experiencia con otras lectoras, podría resultar de mucha utilidad para ellas, entre todas podemos ayudarnos o sino ¿quién lo hará?