¿Te gusta el yoga y estás embarazada? ¡Prueba estas poses!

El yoga se puede practicar en cualquier momento y es una disciplina que está aconsejada para realizar durante el embarazo debido a que te preparará para el momento del parto y te dará mucha flexibilidad.

A continuación te quiero enseñar algunas poses de yoga para que practiques mientras esperas a tu bebé, sígueme.

Pose de la montaña

De esta pose parten el resto de las asanas que puedes practicar estando embarazada. Ponte de pie y separa las piernas para que tus pies queden a la altura de las caderas. Dobla un poco las rodillas y toca tus manos mientras las llevas a la altura del pecho tocando palma con palma. Cierra tus ojos y respira profundamente.

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Pose del triángulo

Ponte de pie y separa las piernas. Pon los dedos de tu pie derecho hacia adelante y los del pie izquierdo hacia afuera. Dobla la pierna izquierda colocando la mano sobre el muslo mientras miras hacia abajo. Inhala y exhala mientras levantas el brazo derecho por encima de tu hombro y gira la cabeza mientras miras hacia arriba. Coloca tu brazo izquierdo sobre el muslo que usas para apoyarte. Haz una respiración mientras bajas el brazo derecho y enderezas la pierna. Vuelve a la pose inicial y repite durante 5 respiraciones completas. Vuelve a repetir la pose cambiando de lado. 

Pose de la vaca y del gato

Ponte en cuatro patas inhala y arquea suavemente la espalda mientras miras hacia arriba. Exhala y mete la barbilla hacia adentro mientras llevas la columna hacia afuera. Siéntate sobre tus talones en la pose del niño y relájate durante una respiración. Repite la secuencia 10 veces. Esta pose puedes usarla durante el momento de las contracciones si así lo deseas. 

Pose sencilla

Siéntate sobre la esterilla o sobre una almohada (como te resulte más cómodo) y cruza las piernas al estilo indio. Pon las manos en la parte baja de tu abdomen o coloca una sola y la otra en la parte superior. Cierra los ojos e inhala profundamente mientras relajas los músculos del piso pélvico. Exhala mientras te concentras solo en tu respiración y quédate así todo el tiempo que desees.

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Recuerda que antes de empezar a practicar cualquier tipo de ejercicio durante el embarazo es mejor que consultes con tu obstetra, pues no siempre es aconsejado hacerlo sobre todo si necesitas hacer reposo. Si estás en condiciones de comenzar a hacer yoga no lo dudes ni un instante, verás que ganarás flexibilidad muy pronto.