Muchos padres se sienten culpables cuando tienen que decir “no” a sus hijos. Pero eso no debe ser así, pues decir que no a nuestros niños es fundamental para su buena educación. ¿Acaso sería un buen padre o una buena madre quien consiente todos los caprichos de su hijo?
Cómo decir que no a nuestros niños
Por:Univision
Los límites son esenciales para que los chicos aprendan qué está bien y qué está mal, para que se formen en valores y para que sepan que en la vida no se puede todo lo que se quiere. Además, de esta manera, los niños aprenderán también a hablar con sus padres, consultarlos y escuchar sus consejos. Si no les ponemos límites, se malacostumbrarán a “pasarnos por encima”.
Por lo general, cuando decimos que no a un pedido de un niño, este se pondrá a llorar y llorar para cumplir sus objetivos. ¡Pero no debemos permitirlo! A cualquier padre o madre le rompe el alma ver a su hijo llorar, claro está, pero en este caso debemos mantenernos firmes en nuestra postura. Pensemos que le estamos haciendo un bien aunque ellos no se den cuenta.
Sé siempre consistente: si dices una cosa a tus hijos, actúa de acuerdo a ella. Recuerda que en la infancia los padres son modelos a seguir para los niños y predicar con el ejemplo es una manera de aprender para ellos.
Aquellos niños que se han criado bajo la supervisión de los padres y con los límites necesarios (tampoco hay que abusar) tienden a estar mejor emocionalmente y son más seguros que aquellos que fueron demasiado consentidos.