¿Cómo aliviar el dolor de oídos en niños?

Gracias a Dios, no puedo decir que los dolores frecuentes de oídos hayan sido motivo de preocupación y de horas sin dormir por las noches. Mis hijas no los han sufrido, más que sólo alguna que otra vez que yo recuerde. Pero tengo una amiga que lamentablemente no puede decir lo mismo. Una de sus tres hijas sufría dolor de oído frecuente, debido a que uno de los conductos internos de uno de los oídos era más delgado de lo normal, por lo tanto, se llenaba más fácilmente de mucosidad, provocándole las tan dolorosas otitis.

Por supuesto, la visita al médico es obligatoria para que nos indique el tratamiento adecuado, pero mientras éste surte efecto, aquí te dejamos algunos consejos para aliviar el dolor de oídos en niños, algunos de los cuales mi amiga implementó con resultados exitosos. 

Reiteramos que estos consejos no suplantan para nada la  consulta con el pediatra, la que consideramos de vital importancia.

Cómo enfrentar la otitis en niños

Para aliviarle el dolor a tu pequeño, que puede ser muy agudo, realízale compresas tibias, manteniendo una toallita tibia sobre el exterior del oído. Muchos médicos recomiendan que cuando los niños sufran de dolor de oídos duerman en posición reclinada, de acuerdo por supuesto a la edad del niño. Mi amiga se pasaba largas horas sentada por las noches en un sillón, sosteniendo a su hija en sus brazos, manteniendo su cabeza descansando sobre su pecho.

Respeta a rajatabla el horario de la toma del antibiótico que te recomiende tu pediatra. Es muy importante para curar la infección y de esta manera disminuir el dolor de oídos.

Consulta con tu pediatra si debido a la frecuencia de las otitis es necesario la consulta con un audiólogo. Esto puede prevenir futuros males mayores. También ten en cuenta la importancia del uso de tapones para los oídos, en los casos en que tu hijo frecuente una piscina.

Si notas que tu hijo, continúa con frecuentes dolores de oído y no encuentras una respuesta eficaz con su pediatra, no dudes en consultar con otro profesional ni por un momento. Aunque sea el médico que atendió a todos tus hijos y le tengas absoluta confianza, la salud de tu pequeño está por encima del apego que uno pueda tener por los profesionales. Después de todo, nadie es perfecto, ni siquiera un buen médico. 

Ten en cuenta que las consecuencias de los dolores frecuentes de oído en los niños realmente perjudican su calidad de vida, ya que sus horas de descanso y sueño se ven afectadas, además de poner en peligro el aprendizaje del lenguaje, en el caso en que sean muy pequeños.

Como decimos siempre en EntrePadres, la prevención es siempre lo más importante para preservar la salud de nuestros hijos, tanto física como emocional.