Cómo tener una mente positiva

Todos sabemos que la mente es muy poderosa y que, según la actitud y pensamientos que mantengamos, regulará nuestras acciones y desempeño en la vida de una forma favorable o negativa. Pero para que la balanza siempre tienda a volcarse para el lado de las experiencias favorables, ¿Qué te parece si vemos cómo tener una mente positiva?

Realiza buenas acciones

Cualquier comunidad está repleta de oportunidades para que tú puedas hacer buenas acciones. Desde instituciones de beneficencia que te agradecerán cualquier donación que puedas hacerles, hasta protectoras de animales a las que puedas echarle una mano como voluntario.

Pero además de estos casos concretos, puedes fomentar una mente y estado de ánimo positivo realizando pequeñas buenas acciones en tu barrio o cuando caminas por la calle, como puede ser ayudar a alguien mayor a cruzar la calle, ceder el asiento a una mujer embarazada, regresar un objeto perdido a su dueño o colaborar con una rifa escolar.

Cualquiera de estas oportunidades, y muchas otras más, se presentan a diario en la vida de cualquier persona, pero muchas veces se las ignora por considerarlas vergonzosas, inútiles, o que no son de nuestra incumbencia, pero la verdad es que constituyen una excelente forma de cargar la mente con pensamientos positivos.

Piensa en cosas que te hacen sentir bien

Todos, en algún momento del día, de la semana o del mes, tenemos momentos de depresión y en los cuales nuestra mente se carga de pensamientos negativos o de desánimo. Pero una sencilla forma de revertir esta situación es pensar en las cosas que te hacen sentir bien y realizado.

Por ejemplo, si te encuentras en tu trabajo deprimido por todo lo que aun te resta por hacer, solo piensa en aquellas cosas reconfortantes que te esperan en tu casa, como reencontrarte con tu familia, visitar a un amigo, o simplemente de disfrutar de una relajante bebida frente a tu programa favorito.

Mantén un rostro positivo

Recuerda que la expresión del rostro es una de las principales formas de exteriorizar nuestros pensamientos y actitudes, y viceversa, por lo que mantener siempre un rostro amable y con una sonrisa en los labios no solo hará que te sientas mejor, sino que también impulsará la buena energía en tu entorno, que a su vez te responderá con multiplicadas oleadas de positivismo.

Además, recuerda que este mismo principio es utilizado como base fundamental del Yoga de la risa, por lo que puedes estar seguro de sus buenos resultados.

Piensa en tus sueños y objetivos

Aquí no nos referimos a que concentres tu mente en sueños irrealizables o fantásticos, pero sí a que le dediques unos minutos a deleitar tu mente pensando en aquellas cosas reales y los objetivos que te has planteado y que puedes realizar.

El solo hecho de imaginar un proyecto concretado de forma exitosa es una buena forma de hacernos sentir bien, y de redoblar nuestras energías para seguir luchando por el mismo, por lo que antes de compadecerte por cualquier revés sufrido, o de preocuparte por posibles problemas, mejor concentra tu mente de forma positiva en tus sueños y objetivos felizmente realizados.

Agradece los dones de tu vida

Todos nos hemos lamentado en alguna ocasión de que nos falta tal o cual objeto, de que no estamos en forma, o de que no nos gusta el trabajo que tenemos, pero ¿nos hemos puesto a pensar en todas aquellas cosas que tenemos, materiales e inmateriales, que enriquecen nuestra vida? Salud, amigos, estudios, la posibilidad de darnos algún gusto, o el simple hecho de vivir en un entorno agradable.

Siempre se poseen elementos positivos en la vida, así como negativos, es verdad, pero si concentramos nuestra mente en los primeros, lograremos un estado de ánimo y energía que nos permitirán revertir o superar los aspectos negativos.