Con frecuencia solemos pensar que tenemos cosas que «arreglar» o «mejorar» de nosotros mismos. Es más, tendemos a ser bastante exigentes con respecto a nuestras propias reglas y obligaciones. Como consecuencia, muchas veces nos vemos extenuados y confundidos.
7 lecciones de vida empoderadoras que todos deberíamos recordar
Por:Univision
Lo cierto es que sí podemos cuidarnos de nosotros mismos con una alimentación equilibrada y, sobre todo, llevando una vida sin estrés. Sin embargo, esto no implica que nos «falten» determinadas características. Para desarrollar esta visión, hoy compartimos contigo 7 consejos que te ayudarán para cultivar el amor propio y potenciar tus dones. Encuéntralos a continuación.
1. No eres lo que la gente dice que eres
No son pocas las personas que dedican tiempo y energía de sus vidas a pensar en las opiniones de los demás sobre ellos mismos. Es más, en general, estas opiniones provienen de personas ajenas a nuestro círculo o de aquellos que ni siquiera revisten relevancia alguna en nuestra vida.
En realidad, no deberíamos invertir ni un segundo en intentar complacer a nadie. Estar a gusto con nosotros mismos y con nuestras decisiones ya es suficiente. No importa tanto, entonces, cómo nos ven los demás, sino cómo nos vemos nosotros mismos.
2. No eres un número
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Solemos colocar la balanza como nuestra enemiga, cuando en realidad ella solo nos muestra un número. Lo mismo sucede con las notas de los exámenes o el sueldo a fin de mes. Pero ¡eres mucho más que un número! La culpa y los miedos no aportan (más bien restan) en el camino del amor propio y obstaculizan el encuentro con nuestros talentos.
3. El camino es más importante que la meta
Por supuesto, no vamos a negar que alcanzar nuestros objetivos nos brinda satisfacción. Sin embargo, recuerda que, a fin de cuentas, la enseñanza que nos deja el camino recorrido siempre es más relevante que haber alcanzado la meta. Aprender a disfrutar el viaje será entonces una estrategia que nos llenará de entusiasmo y confianza.
4. A veces el mejor plan no es el que imaginamos
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Cuando la realidad no se desenvuelve como queríamos que lo haga tendemos a sentir frustración y enojo. Para evitar estos momentos lo mejor es soltar las expectativas y comenzar a fluir con aquello que se nos presenta. No olvides que tanto las situaciones que consideramos negativas como las positivas nos brindan importantes lecciones para nuestro crecimiento personal.
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5. Estar solitario no es lo mismo que estar solo
Cuando estamos a gusto con nosotros mismos comenzamos a disfrutar en plenitud de nuestra compañía. Esto no implica que estemos solos. Seguramente habrá personas que compartan nuestra vida y cuya compañía podamos disfrutar. Ambos tiempos, en solitario o con otras personas, nos aportan su belleza y sus enseñanzas.
6. Nunca podremos completar todo
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La lista de cosas «por hacer» tiende a alargarse incluso cuando hemos completado varias actividades en el día. Sin embargo, surgirán nuevas tareas para completar. Cambia el enfoque y comienza a ver esta lista no como obligaciones, sino como actividades en las que puedes enfocarte y dar lo mejor de ti cada día. De esta forma, cambias el pensamiento negativo de que «nunca es suficiente» por uno positivo en el cual agradeces por cada segundo de vida y por tener la posibilidad de cumplirlas.
7. Los dolores emocionales nos brindan una información valiosa
En vez de negar los dolores físicos o emocionales que van surgiendo en nuestro día a día, intenta enfocarte en su origen. Mediante esta reflexión podrás obtener una información valiosa que te llevará a experimentar una vida más liviana y satisfactoria.
No hace falta que intentemos modificarnos para lograr caber en un molde planteado por patrones externos. Vivir la vida desde todo nuestro potencial es más que posible, solo tenemos que estar dispuestos a lograrlo. Esperamos que te sirvan de inspiración estos consejos y que puedas ponerlos en práctica en el día a día.
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