7 cosas sorprendentes que pasan cuando aprendes a disfrutar de tu soledad

Esto es clave si buscas ser una mujer fuerte e independiente...

A muchas de nosotras nos siguen vendiendo la idea de que nuestra mayor aspiración debería ser las esposas, novias o parejas de hombres exitosos. ¡Como si nosotras debiéramos seguir siendo dependientes de ellos!

Pero cuando no logramos encontrar a ese príncipe azul y nos cansamos de besar sapos, nos damos cuenta que la única forma de salir adelante, emocional y económicamente, es hacerlo por nuestra cuenta.

En otras palabras, si primero no aprendes a disfrutarte a ti misma, ¡nadie lo hará! Es mejor que aprendas a disfrutar de tu presencia cuanto antes.

#1 Te sientes más independiente

Cada vez que voy a casa de alguna de mis amigas casadas o en pareja, siento un poco de lástima por ellas.

Mientras la mayoría tiene que trabajar, hacerse cargo de la casa ocuparse de sí mismas y hasta ocuparse de algunas cosas de su pareja (como lavarle la ropa o cocinarle), yo tengo mi casa como se me da la gana, no tengo que decirle a nadie a dónde voy ni cuándo vuelvo, gasto el dinero como me parece, como cuando tengo hambre y duermo cuando tengo sueño, sin que nadie opine, critique o trate de acomodarme a su gusto.

¡Eso es la independencia, chicas!

#2 Dejas de tratar de hacer feliz a todos

Al sentirte más independiente, entiendes que tratar de hacer feliz a todos no solo es agotador, sino que además es inútil.

A veces me encantaría que mis amigas en pareja entendieran que no hay nada que ellas puedan hacer para “hacer felices” a sus parejas. La otra persona es feliz o no lo es, y eso no depende de ellas.

#3 Dejas de buscar aprobación

Mi exmarido era un maniático de la limpieza del hogar, y los años que estuvimos juntos me enloqueció intentando que fuera una persona más ordenada.

Después de separarme y empezar a vivir sola, descubrí que soy desordenada por naturaleza y que no me molesta ser así. Así que ya no busco la aprobación de otros; me toman o me dejan, ¡pero no se atrevan a intentar cambiarme!

#4 Te vuelves más productiva

Una de las cosas de las que la mayoría de las mujeres se quejan cuando están solas es, justamente, el tiempo que pasan en soledad.

Las horas parecen no pasar, y siempre están buscando “algo” para llenarlas. De lo que no se dan cuenta es que se trata de una gran oportunidad. Disfruta de esas horas de “soledad” con libros, arte, charlas con amigas, clases, danza, espiritualidad, yoga, ejercicio, viajes, paseos.

¡Hay tantas actividades apasionantes para hacer sola!

#5 Comienzas a hacer lo que amas

Como consecuencia de lo anterior, luego de experimentar con varias cosas, en algún momento encontrarás algunas que se transformarán en auténticas pasiones.

Desde tocar un instrumento o bailar ballet, hasta trabajar como voluntaria en un refugio de animales o empezar a participar en política. Pronto descubrirás que ese tiempo libre comenzará a dar frutos: te sentirás feliz haciendo lo que amas.

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#6 Dispones de más energía

Estar sola también te ayuda a reponer y administrar mejor tu energía. Quizás al principio te descubras aceptando invitaciones a lugares y con personas que te agotan solo para llenar el vacío y pasar el tiempo.

Pero una vez que empiezas a disfrutar de la soledad te vuelves más selectiva y cuidas tu tiempo e inviertes tu energía solo en aquellas cosas que realmente sientes que valen la pena.

#7 Disfrutas más tus relaciones

Muchas veces damos por sentadas a las personas que tenemos alrededor porque, justamente, siempre están ahí. Pero cuando aprendes a disfrutar la soledad cada encuentro con el otro, sea un familiar, un amigo o una potencial pareja, se disfruta mucho más gracias al contraste.

Sé que a muchas puede darnos miedo elegir estar solas; pero una vez que tomas la decisión descubres que hay cosas increíbles que comienzan a suceder en tu vida una vez que aprendes a disfrutar de la soledad. ¡Y hasta dormir sola no es tan malo después de todo!