Believe in love, el mensaje que dejaron las estrellas del Super Bowl

Fuegos pirotécnicos le dieron la bienvenida a Chris Martin quien interpretando su éxito `Viva la vida´ le dio paso a cientos de personas que llenaron el campo de juego del Super Bowl durante el show de medio tiempo. Un escenario amarillo en forma de cruz relucía en colores sicodélicos mientras el vocalista de la banda Coldplay cantaba sus más recientes éxitos.

Mientras tanto, miles de flores de papel giraban en el enorme escenario invocando los aires hindi y étnicos de su último lanzamiento “Hymn for the Weekend". De repente, el productor Mark Ronson inturrumpió los sonidos de la banda británica y le dio con sus tornamesas la bienvenida a Bruno Mars, que salió con un séquito de bailarines vestidos todos con trajes negros de cuero brillante y gigantes cadenas doradas muy al estilo hip hop.

Por su parte, Beyoncé apareció entre llamas y el latir de un redoblante en el campo de juego, con bailarinas todas de color y pelos alborotados en minúsculos vestidos de cuero y medias de malla. Un duelo de mixes y canciones puso a el ejército de Beyoncé al lado del de Bruno Mars para cantar luego junto a Chris Martin el éxito radial `Uptown funk´.

El escenario se hizo una pantalla de leds en donde se proyectaban videos y se recordaban a las estrellas que se han unido durante décadas para celebrar el Super Bowl, desde Michael Jackson hasta Madonna, mientras la orquesta juvenil de Los Angeles dirigida por el director venezolano Gustavo Dudamel sacudía los corazones de toda la audiencia que sostenía pancartas de color que cerraron la presentación con una sola frase: Believe in love. (Lea la nota completa sobre la actuación de Dudamel aquí)

Hace muchos años, el show de medio tiempo del Super Bowl estaba a cargo de las bandas de guerra de las universidades, pero ese espacio se ha convertido en un verdadero reconocimiento para los artistas que están liderando la escena musical del momento. Así año tras año, pareciera que la elección de las estrellas del show de medio tiempo del gran juego fuera un vaticinio de quienes van a ser realmente determinantes a lo largo de todo el año en la música.

Por su parte, al inicio de la velada, Lady Gaga apareció en el campo de juego en un suit de pantalón rojo brillante -con un zapato azul y otro de rayas rojas y blancas- y le arrebató aplausos y ovaciones a la audiencia que pareció sobrecogida por su interpretación del Himno de los Estados Unidos, antes de dar inicio al Súper Bowl. La diva, que tiene cada vez más platinada su melena, le dio rienda suelta a su voz que le demostró a una millonaria audiencia por qué es la estrella que hoy en día gana Golden Globes y es nominada a los Oscar.

Al finalizar su interpretación, convencida de haber entrado a la lista de las ejecuciones memorables como la de Whitney Houston, Marvin Gaye y Beyoncé, Lady Gaga, que combinó la sombra de sus ojos del mismo color de su traje y sus uñas con el azul de la bandera, hizo su tradicional signo de saludo a toda su comunidad de `Little Monsters´ en señal de victoria.

Una vez más el Super Bowl se convirtió en un encuentro que más que deleitar a la audiencia con las estrellas del fútbol americano, capturó los ojos de millones con su apuesta por ser un verdadero evento de entretenimiento.