7 cosas descubiertas por carambola que hacen nuestra vida mucho más fácil

Muchas de las cosas que actualmente usamos se inventaron para resolver problemas o para, de una forma u otra, hacernos la vida más fácil. Esto se extiende a cada aspecto de nuestras vidas y prácticamente a cada acción que hacemos.

Pero muchas de las cosas que hoy le salvan la vida a la mujer (usando el sentido jocoso de esta expresión) de hecho se descubrieron por casualidad. Te invito a ver 7 ejemplos de cosas que te son muy útiles y que quizás no sabías que se inventaron por carambola.

1. El horno microondas

Poco aparatos son más imprescindibles que el horno microondas, ¿no crees? Nos permite improvisar o calentar una cena sin mayores complicaciones. Pues te cuento que el investigador norteamericano Percy Spencer estaba tratando de crear un radar de vacuum cuando notó que el caramelo que llevaba en su bolsillo se había derretido. Luego lo probó con palomitas de maíz y… ¡Eureka!

2. El velcro

Esta conveniente invención fue descubierta por el ingeniero suizo George de Mestral. Durante una cacería notó que las rebabas de su equipo se pegaba al pelaje de su perro. Entonces decidió replicar este efecto en su laboratorio.

3. Las hojuelas de maíz

Entre sus muchos inventos, los hermanos John y William Kellogg descubrieron las hojuelas de maíz… por accidente. Interesados en la nutrición, los Kelloggs querían descubrir un sustituto para el pan que fuera más saludable, entonces pusieron el maíz a hervir. Lo gracioso del asunto es que lo dejaron hervir por demasiado tiempo accidentalmente. Al ver y probar el resultado, sabían que habían resuelto el desayuno de muchos, incluso más de 100 años después.

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4. El acero inoxidable

Parece no tener conexión con la mujer, pero este invento nos quitó un gran dolor de cabeza. ¿Te imaginas si tus cubiertos, utensilios y equipos de cocina se oxidaran rápidamente con el contacto con el jugo de limón, por ejemplo? El jugo de limón fue precisamente uno de los corrosivos que usó el científico inglés Harry Brearley para probar la durabilidad de su aleación de acero mientras inventaba un cañón inoxidable. Más tarde tuvo la idea de llevar su invento a la cocina.

5. Los chips de papa

Seamos claros, las papas fritas son deliciosas de cualquier manera, pero el corte de los chips da una textura crujiente que eleva las papas a un nivel superior. Resulta que el neoyorquino George Crum realizó el corte para desquitarse con su cliente, el cuál había devuelto las papas varias veces alegando que estaban muy blandas. Para su sorpresa, todos, incluyendo el cliente gruñón, se enamoraron de su invención.

6. El teflón

Pocos inventos te ayudan más a lucir como una experta en cocina que el teflón, no se pegan los huevos revueltos ni el bacon, ¿se puede pedir más? Roy Plunkett descubrió esta sustancia química al mezclar sus componentes por accidente. Luego de comprobar sus propiedades, DuPont la patentó y el resto es historia.

7. La penicilina

Este medicamento que desde hace casi un siglo se ha convertido en uno de los antibióticos más usados y ha salvado innumerables vidas, fue descubierto por carambola. Justo antes de irse de vacaciones, el científico inglés Alexander Fleming dejó un cultivo de estafilococo esperando que esta bacteria se reprodujera durante ese tiempo. Para su sorpresa, lo que proliferó fue el hongo penicillium, que producía una toxina capaz de inhibir el desarrollo de la bacteria. Así fue como surgió el primer antibiótico de la historia. ¿Sorprendente verdad?

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