6 cosas que todos pensamos a la hora de recibir el primer beso en una cita

Sales con esa persona que te encanta desde siempre o que te gusta y recién estás conociendo. La noche marcha por el buen camino y todo parece que decantará en futuras y nuevas salidas con ese ser especial. Y entonces, desde el improvisto, o a veces no tanto, ocurre  el beso. Una expresión que nace de las ganas de ambas partes y que se divide en 2: el que toma la decisión de besar y el que es besado y acepta.

Sin dudas, en nuestra cabeza pasan muchas cosas después de ese primer beso en una cita. ¿Cuántas son? Imposible recopilarlas a todas. Pero decidimos dejar algunas de esas que seguro todos hemos sentido en ese momento tan particular. 

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1. Fue demasiado bruto

El primer impulso para besar puede tener consecuencias realmente malas. Quizás por los nervios o por la tensión pueden producirse choques de cabeza, mordeduras u otros problemas indecorosos que sin dudas nunca hubiéramos querido que suceda.

2. Oh, no!... tiene mal aliento

Enorme problema. Terrible e irreversible en muchos casos. A veces, contra esos problemas no se puede hacer nada y sin dudas nos generan algo o mucho fastidio ¡Somos humanos!

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3. ¿Le habrá gustado?

Comienza el proceso de neurósis por el que todos pasamos. Nuestra cabeza va a empezar a pensar a muchas revoluciones por minuto. ¿Le gustó?

4. Mmmm... Besa muy bien

Cual enamorados de película romántica volveremos a pensar en ese beso una y otra vez durante la semana, recordándolo e imaginando los próximos que esperamos recibir. Punto gigante a favor del que hizo bien las cosas a la hora de besar.

5. Eh... Besa horrible

Punto en contra. Un mal primer beso puede hacer que el partido sea irremontable (¡perdedor!). Sin embargo, se le puede volver a dar una chance al otro. Errar es algo completamente posible y normal. No somos perfectos.

6. ¿Saldremos de nuevo después de este beso?

Y esta es la pregunta que nos hacemos si nos gustó la salida, el beso y todo el contexto en general. Sin dudas, un buen beso de ambas partes influirá para no solo pensar en esta cuestión sino también para que tengamos ganas de vernos nuevamente. Si todo marcha por buen camino estaremos pegados a nuestro teléfono esperando ese mensaje de la otra parte que dice "¿Cómo estás?".

A partir de ese momento, todo será felicidad.

Estas son algunas de las preguntas que nos hacemos después del primer beso en una cita. Nuestra cabeza sin dudas es un mar de establecer conjeturas e hipótesis que en muchos casos se cumplen pero también en muchos otros no.

Querido enamorado... que comience el juego. Ahora, es el momento de ver hasta dónde seguirá esta nueva relación.

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