Ya me imaginaba yo que Jackie no iba a dejar que le hicieran una intervención, sin pelear. Su compromiso con su adicción es muy fuerte y por ahora no esta lista para reconocer que esta en problemas por eso. Eso es lo que se pudo apreciar del inicio de la tercera temporada. Mientras llegaba el momento en que diera su brazo a torcer, se enfrentaba con mas obstáculos y problemas que ella misma se había buscado. Cuando uno ve como se mete en líos una y otra vez le entra a una cierta incomodidad lastimosa.
Nurse Jackie: La Negación Personificada

Se supone que en la próxima temporada ella logrará (como siempre lo hace) zafarse temporalmente de la presión de su esposo Kevin o de su amiga la Dra. O'Hara. Además lidiara con los problemas de paranoia de su hija, a quien no le gusta su nueva escuela, el ex-amante a quien odiamos todos pero que no logra quitarse de encima, y para rematar aquel traficante al que robo las píldoras en la pasada temporada que también la esta buscando para ajustar cuentas.
Además se mudó a su casa su hermana, quien no es alguien fácil de manejar. En el hospital, la comedia queda a cargo del ridículo y raro Dr. Cooper y de la Directora del hospital, Dra. Akalitus quien por estos días anda obsesionada con Michelle Obama.
Esta comedia tiene ese factor común a casi todas las comedias de Showtime, un ambiente incómodo y tenso, y esa sensación de que se viene algo grande y desastroso que Jackie un día no podrá manejar más. Sólo es cuestión de tiempo.
La cuarta temporada de Nurse Jackie comenzará en el 2012.








